Page 24 - Centenario

Teresa Ugarte y Risell Condesa de Villanueva
Fue una de las cutanas quc mas se dis tinguio en la fundacion dc La Habana. Con triLuyo no solo a csta casa sino tarnLien a la.*; de Manhatlanville, Sarria y Chamartin dc la Rosa. Despues de viuda se dedico a obras de piedad, obteniendo permiso para vivir en cl Sagrado Corazon, primero cn Barcelona y luego en CKamartin dc la Rosa, en Madrid, donde murio el 7 dc octubre de 1866. Sus restos se conservan en esa casa cn una capllli- ta fabricada en los terrcnos del convento.
Gertrudis Velazquez y Ugarte
Se encuentra entre las iunda- doras que mas alumna.s han dado al Sagrado Corazon. Re- cibio su medalla de Hi/as dc Maria cl dia de ,su sallda del colegio le pidio a la Sma. Vir- gcn Icner una larga dcscenden- cia. Trece litjos le dl6 el Senor.
Educo en el Sagrado Corazon a sus cuatro hi/as, luego lueron sus once nletas, trecc biznletas y clnco talaran/elas cslan nc- Inalmonle on el rolegio.
Icnihic ansi('(lacl cnu' clio a la Rvtla. Matlr(‘ Hartley, alacarla de fiebre amarilla. La solicilucl cle la socie- ilad ciihana y la abnogacion iieroica dc una joven qu(' aspiraba a cnlrar pn el Inslifulo, Rafaela Dono- so, y a quien la Madre Tominasini exigio previamen- !(' qiie obluuiera del Senor la salud para la Rvda. Madre, salvaron a esia la vida. “En aquella ocasion —dice la Madre Tommasini— aprendi a amar a las ciibanas de una rnanera especial y ese amor encen- ilido en ini corazon no se extinguio jamas ,
La valiosa ayiida prestada desde los primeros dias per el Rector de los jesuitas de Belen (R P . Mimar), se exlenderia no solo a la primera Superio- ra del Cerro, Rvda. Madre Juslina Lay, —activa cu- bana que atendia a todo, sin Asistenla ni Maestra General—, sino fambien a la fundacion de Sancti Spirilus, realizada a fines de 1863 y que tuvo una exislencia efimera, airnque fructuosa, de solo cinco aiios; su sitKacion estrategica entre los dos ejercitos combatientes, obligo a nueslras Madres a clausurar- la, durante la guerra del ano 1868.
Siendo Superiora la Madre Micaela Fesser, se coloco, con toda solemnidad, el 18 de abril de 1875, la primera piedra de la capilla del Cerro, en el cen- tro del edificio, no terminado aun. Muchos invita- dos —adernas de las ninas— acompanaron a la Co- manidacl, trasladada al terreno —senalado con ban- deras y gallardetes— que fue bendecido por el Cano- nigo, Ilmo. Sr. D, Benigno Merino. Dos afios mas tarde y en la misma festividad del Patrocinio de San Jose, tuvo la Madre Fesser la inmensa satisfaccion de asistir a la bendicion del nuevo edificio, casi con- cluido. Esta vez fue el Ilmo. Sr. Pinol, Arzobispo de Guatemala, quien oficio en la ceremonia, asistido de nntrido clero y de los Superiores de los PP. Jesui­ tas, Paiiles y Escolapios. La concurrencia puede ima- ginarse, figurando ya en ella un centenar de Sras. Hijas de Maria, establecidas en el Cerro desde la fundacion. No era, ciertamente la primera vez que se reunian corporativamente, pues desde los comien- zos, acudian con entusiasmo a las dos procesiones que se suelen tener en los Colegios todos del Sagra­ do Corazon: la de La Inmaculada, que termina con la ofrenda de lirios a la Sma. Virgen, y la del Co­ razon Divine, desplegandose esta por el jardin, en liomenaje a la Eucaristia, que se lleva triunfalmente, bajo palio.
El 21 de enero de 1904 se tuvo, por fin, la con- sagracion de la capilla, en cuya grancJiosa ceremonia oficio el Ilmo. Sr. Pedro Gonzalez Estrada, Obispo cle La Habana y amigo fidelisimo del Instituto. Asi Iranscurrieron los afios, viendo aumentar la docili- dad de las niiias a las directivas del Colegio y a su reglamento; en cuanto a los estudios, durante mu- clio tiempo sc siguio el sistema que la Fundadora esiablecio en lodas sus casas, con un caracter predo- ininaiilemenle lilcrario mas adaplado a las necesi- dadcs de la vida (|uc entonces solian llevar. En el iiilcrnado. In graduacion del curso superior culmi- naba con la cruz de oro y la corona de laurel. Con el correr de los aiios y las niu'vas necesidades se ban