Page 18 - Mitos y otros relatos de la Antigua Grecia

También hijos de Jápeto fueron Epimeteo, Atlas y Menecio (a quien Zeus der- rotaría en la titanomaquia), siendo la mayoría encarcelados en el Tártaro, la zona más profunda del inframundo.
[...] De lo hasta aquí expresado, observamos que las divinidades que se van creando son, en la primera generación, el tiempo (Cronos), la tierra (Gea), el cielo estrellado (Urano), la noche, la luz del día, la muerte, el sueño, el mar (Ponto); en la segunda ya aparecen los Titanes, los Gigantes, las tipologías de carácter y conducta como la memoria, la justicia, las horas, la equidad, etc. y en la tercera generación, con los dioses olímpicos ya aparecen claramente los tipos humanos, representados por hombres y mujeres, que engendrarán otros dioses o héroes mitológicos.
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las cinco edades de Hesíodo
Haciendo la salvedad de que las diferentes versiones presentan diferencias sig- nificativas, tomaremos algunas que puedan orientarnos.
El primer testimonio del mito de las razas, proviene del poema “Trabajos y días” de Hesíodo (700 a.C.) donde el poeta cuenta como los dioses y los humanos tuvieron el mismo origen.
Al principio, los dioses crearon una estirpe de mortales, que existieron cuando reinaba Crono y vivían como si fuesen dioses, sin fatigas, preo- cupaciones ni miserias, manteniéndose siempre jóvenes y fuertes y dis- frutando de sus vidas sin conocer el mal ni la muerte, ya que al llegar a ese momento, entraban en un largo sueño.
Una vez que hubiesen sido sepultados bajo tierra, Zeus les daba el privilegio de ser protectores de los mortales, vigilando sus acciones y proveyéndolos de riquezas.
Tiempo después, Zeus creó una raza justa y virtuosa, la de los héroes, también llamados semidioses, generación que, según Hesíodo, pereció en las hazañas de las guerras de Troya y de Tebas. Más adelante Zeus creó a otra raza que, siendo contemporáneos del poeta (700 a.C.) pasarían por tribu- laciones, quedando el ser humano solo con sus amarguras y sin encontrar el remedio para el mal.
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