Page 21 - Boletín Mensual de Información 38 DICIEMBRE
P. 21

 ¿ Para qué sirve la inteligencia emocional en el trabajo? El objetivo de la inteligencia emocional no es controlar nuestras emociones o bien retenerlas, sino saber manejar las situaciones en las que aparecen emociones incontrolables, utilizando técnicas y estrategias que nos permitan reflexionar y pensar cuál es la mejor opción.
Adentrando la idea del párrafo anterior, el día a día laboral, está lleno de emociones tanto por las funciones realizadas, así como por el trato con las personas, cabe señalar que cada uno de nosotros comprende una serie de emociones que nos hace diferentes a los demás, por ello enfatizar en este tema nos puede conllevar a una mejora en torno al ambiente laboral y personal.
Este concepto comenzó a profundizarse y a tomar importancia en 1995 con Daniel Goleman, siendo para él “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de manejar adecuadamente las relaciones”.
Una habilidad emocional importante de mencionar en el presente artículo es la Empatía, la cual consiste en saber reconocer al otro, con sus emociones e ideas, tener empatía es entender qué
sienten las personas que nos rodean y porqué lo sienten.
En el entorno laboral, practicar comportamientos empáticos supone una mejora en las relaciones con los equipos, en la comunicación, en el rendimiento así como en el desempeño laboral.
Entender a los demás y ser entendidos hará que a los trabajadores les resulte más fácil tratar y cooperar entre ellos. Esta habilidad juega un papel esencial en saber cuáles son las necesidades de los demás y en no dudar en ofrecer ayuda cuando sea requerido.
Hablemos ahora respecto a la motivación, debemos tener siempre presente que somos capaces de lograr aquello que queremos conseguir. Pero también debemos proponernos objetivos realistas y confortante tanto en la vida laboral así como social.
Finalmente la habilidad del autoconocimiento que básicamente se refiere a la conciencia de uno mismo. Consiste en conocer nuestras fortalezas y debilidades, nuestros objetivos en la vida y cómo queremos alcanzarlos.
Practicar el autoconocimiento hará mejorar nuestra inteligencia emocional. Debemos conocer e interiorizar qué ocurre dentro de nosotros cuando tiene lugar algún tipo de estímulo, ¿a qué se debe?, ¿cómo aceptarlo o cambiarlo adecuadamente?
“Cualquiera puede ponerse furioso... eso es fácil. Pero estar furioso con la persona correcta, en la intensidad correcta, en el momento correcto, por el motivo correcto, y de la forma correcta... eso no es fácil.” - Aristóteles.
 Comencemos día a día a trabajar nuestras emociones
e implementémoslas en nuestras funciones diarias, para ver el cambio necesario en nuestro día a día.
Referencias:
https://www.unir.net/empresa/revista/cinco-aprendizajes-de-daniel-goleman-sobre-la-inteligencia-emocional/ https://www.filosofia.mx/inteligencia-emocional-el-desafio-de-aristoteles/
IInteligencia emocional BBooleletítnínMMeennsusuaal l 21 dedeInInfoformrmaaccióiónn
      


















































































   19   20   21   22   23