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66 PIENSE Y HÁGASE RICO
579 ¡Nunca es mucho tiempo! El director de la Ópera Estatal de Viena sabía mucho
580 sobre técnicas de canto, pero ignoraba por completo el poder del deseo, cuando
581 éste adquiere las proporciones de una obsesión. Si hubiera sabido algo más sobre
582 este poder no habría cometido el error de condenar a un genio sin darle una
583 oportunidad. Hace varios años, uno de mis socios enfermó. Con el tiempo
584 empeoró y finalmente fue hospitalizado para someterse a una operación. Justo
585 antes de que lo llevaran al quirófano, lo contemplé mientras me preguntaba si era
586 posible que alguien tan delgado y escuálido como él, pudiera sobrevivir a una
587 operación importante. El doctor me advirtió de que apenas existían posibilidades
588 de que lo volviera a ver con vida. Pero era la OPINIÓN DEL MÉDICO. No era
589 la opinión del paciente. Antes de que se lo llevaran en camilla al quirófano me
590 susurró débilmente, "No se preocupe jefe, saldré de aquí en unos días". La
591 enfermera que lo atendía me miró con lástima. Sin embargo, el paciente sobrevivió
592 sin peligro y cuando terminó la operación su médico dijo: "Lo único que lo salvó
593 fue su propio deseo de vivir. Nunca lo habría logrado de no haberse negado a
594 aceptar la posibilidad de morir."
595 Creo en el poder del DESEO respaldado por la FE porque he sido testigo de cómo
596 ha logrado alzar a personas de orígenes humildes a posiciones de poder y riqueza;
597 he visto como saqueaba las tumbas de sus víctimas; lo he visto actuar como medio
598 por el cual las personas reaparecían en escena después de haber sufrido derrotas
599 de cien maneras distintas y he visto como le proporcionaba a mi hijo una vida
600 normal, feliz, exitosa a pesar de que la Naturaleza lo envió a este mundo sin orejas.
601 ¿Cómo podemos dominar y utilizar este poder del DESEO? La respuesta se halla
602 en el actual y en los siguientes capítulos de este libro. Este mensaje se está
603 transmitiendo por todo el mundo al final de la depresión más larga y quizás, la más
604 devastadora que jamás ha presenciado Estados Unidos. Es razonable suponer que