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experiencias negativas con esa adicción, hasta que comer como locos se vuelva más doloroso que no hacerlo y ten en cuenta siempre tener esa motivación para que sea posible, piensa en tus hijos, amigos, en lo que te pierdes por estar saludable y más aún piensa en tu vida. Cada vez que vayas a comer algo que no te convenga, piensa si en realidad eso te ayuda acercarte donde quieres llegar y ser tu mejor versión o al contrario si cada vez te aleja más de tus sueños y propósitos. Empieza hacer una buena dieta hacer ejercicio y poco a poco notaras la diferencia y estarás gozando del precio de la disciplina, piensa en cómo te veras, como te sentirás y como vivirás, piénsalo visualízalo y ve por ello y deja de ser un esclavo de la comida.
Esclavos de la vanidad:
Amigos antes de hablar de esta esclavitud, me gustaría primero aclarar que hay una vanidad buena y esta es cuando nos queremos ver bien y sentirnos bien, ya nos volvemos esclavos de esta cuando se vuelve obsesivo y cuando la persona piensa que su único valor es la apariencia física, lastimosamente la vanidad descontrolada ha traído tragedias e historias de personas que se dañaron la vida después de tantas operaciones pretendiendo ser perfectos, pero nada más lejos de la verdad, ya que en esa búsqueda de la perfección muchos han encontrado la muerte; otro caso de esto es la enfermedad de la anorexia que viene de la mano de la vanidad. Amigos no te atormentes en siempre complacer a las personas, tanto que arruinen sus vidas por versen atractivos para los otros, no te des el lujo de perder tu familia y las cosas de valor por algo pasajero, recuerda que las cosas importantes son para toda la vida, pero tienes el poder de volverlas pasajeras cuando te esclavizas al cuerpo, a tus deseos y vanidades, siempre tenlo en cuenta. No olvides que los hombres ven lo de afuera (el exterior), pero Dios ve los corazones, por lo tanto preocúpate como te ve Dios y también como te vez tú cuando tratas de complacer a todos, nunca estarás conforme, así que empieza a controlar tu mente, tu cuerpo, las ansiedades y libérate de la esclavitud sin cadenas; que no te pase como la triste historia de una mujer llamada Raquel quien le daría una gran fiesta a su hijo por su graduación y ella quería levantarse la cola para verse más bonita, sus familiares le insistieron que no lo hiciera, “que Dios la mando así y así la querían”, pero ella dijo que: “no había problema, que unas amigas ya se lo habían hecho y que se veían muy lindas”, el caso fue que se dirigió a la sala de estética donde le levantarían la cola, en medio del procedimiento empezó a sentirse mareada los médicos dijeron que era normal, pero horas después murió por este simple
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