Page 1 - Del pacto de Dios
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Mateo 18:20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.








                  La distancia entre Dios y la criatura es tan grande que aun cuando las criaturas racionales le de-
           ben obediencia como a su Creador, éstas nunca podrían haber logrado la recompensa de la vida a

           no ser por alguna condescendencia voluntaria por parte de Dios, que a Él la ha placido expresar en

           forma de pacto—El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y


           de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hom-

           bres, como si necesitase de algo; pues Él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas.

           (Hechos 17:24, 25) -.

                  Además, habiéndose el hombre acarreado la maldición de la ley por su Caída, agradó al Señor

           hacer un pacto de gracia, en el que gratuitamente ofrece a los pecadores vida y salvación por Jesu-

           cristo, requiriéndoles la fe en Él para que puedan ser salvos, y prometiendo dar su Espíritu Santo a

           todos aquellos que son ordenados para vida eterna, a fin de darles disposición y capacidad para


           creer—Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vi-

           virá, (Gálatas 3:11) -; Ninguno puede venir a Mí, si el Padre que me envió no le trajere; y Yo lo re-

           sucitaré en el día postrero. Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios.
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