Page 187 - Anuario 2018
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Secun daria
4o A
1o FILA: Roberto Oña Jacquin, Carla de Juan Merchán, Álvaro Martínez Hernández, Adela Tejedor Agüi, Diego García Alañón, Lara Juárez Torres, Eduardo Bonilla Jimeno, Julia López Rivas, Alejandro Bejarano Pinto
2o FILA: Paula Espinosa Serrano, Marina Nava Araque, Daniel Álvaro Domínguez, Nerea Márquez Díaz-Delgado, Teresa Mangas Fuentes, Joel Pachacama Gualotuña, Gema Cid Fernández, Daniel Guevara Farias, Laura Núñez Moraleda
3o FILA: Iván Canora Álvarez, Gonzalo Calvet Portugués, Lucía Ramírez Lastra, Álvaro Ugena Benito, Sandra Sánchez Casero, Pablo Rodríguez Suárez, María Cavadas Villar, Sofía Ávila Torre
AUSENTES: Valeria Rodríguez Ortiz
TUTORA: Silvia Rodríguez Galdón
AQUEL AL QUE LLAMAN PI
Existen dos grandes reinos, enemigos acérrimos entre sí, cuya rivalidad se remonta al inicio de los tiempos. Desde siempre, han sido incompatibles y no entienden la forma de vida del otro. Por un lado están los Racionales, siempre tan perfectos, tan lógicos y entendibles que incluso resultan aburridos. Ellos son los que gobiernan el mundo, piensan que todo aquello que no es tan lógico como ellos constituye una amenaza para el orden el público y debe ser marginado. Y, por otro, los Irracionales, mucho más espontáneos y alocados, a quienes les encanta vivir la vida al límite, como si no hubiese un mañana, y que consideran a los racionales unos remilgados.
Siempre ha habido una paz relativa entre ellos... Hasta ahora. Ha nacido un nuevo número en el Reino Racional. Dicen que es tan lógico como ellos, pero tan alocado y dicharachero como los odiados irracionales, ¿su nombre? Pi. Este inocente numerito ha hecho caer en desgracia a sus padres, Diámetro y Longitud de la Circunferencia, quienes no pueden ni quieren creer que su amado hijo sea un irracional.
El Reino Racional, incapaz de aceptar a nadie que no sea como ellos, exige su destierro inmediato al Reino Irracional. ¿Lo peor? Que el Gobierno lo ha aceptado. Prefieren abandonar a un pobre e indefenso numerito a su suerte antes que tolerarle.
- Pequeño mío, prométeme que tendrás cuidado y que no te dejarás arrastrar por esos numeruchos indefinidos. - Dijo Longitud de la Circunferencia. - Bueno, pero tampoco les hagas enfadar demasiado, porque a partir de ahora estás en sus manos y no queremos perderte, aunque no podamos verte más. - Le recomendó Diámetro.
- Mamá, papá, no os preocupéis por mí. Sé que soy uno de ellos, no intentéis negármelo porque ya lo sé; pero también sé que soy descendiente de Racionales y eso es más fuerte todavía.
- Te queremos, no lo olvides nunca. - Su hijo les acababa de dar una lección que jamás olvidarían, y el orgullo y la pena a partes iguales les había hecho derramar ya medio océano de lágrimas.
- Yo también os quiero. - Se despidió Pi. Y tras estos, cogió su maleta y se marchó hacia el que sería su nuevo hogar, el Reino Irracional.
Ambos reinos no estaban lejos uno de otro, por lo que a Pi no le llevó más de medio día andando llegar hasta allí. El camino estaba libre de transeúntes, aunque se encontró con toda una fauna y flora desconocida: se encontró con abetos, pinos, zarzas, rosas salvajes, avena loca, patos, corzos, zorros e incluso un rebaño de ovejas. Había estudiado que las ovejas las criaban los Irracionales, así que no debía estar lejos.


































































































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