Page 193 - Anuario 2018
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    CARTA DE DESPEDIDA 2o
         BACHILLERATO
Nuestra aventura comenzó un mes de septiembre hace 15 años, nos encontrábamos en frente de esas puertas verdes, rodeados de niños a los que ansiábamos conocer. Nos despedimos de mamá y papá con lágrimas en los ojos, sin saber que entrábamos a lo que se convertiría en nuestra segunda casa... Apenas sabíamos andar, pero aquellos profesores de infantil, fueron con los que dimos nuestros primeros pasos y de los que todavía hoy, guardamos un bonito recuerdo. Pasaron los años, nos fuimos conociendo en un mundo paralelo, imposible de explicar. Dejamos la plastilina y las siestas y empezamos a jugar a ser mayores. El tiempo va pasando, y las cosas cambiando, cono, mates, inglés, vamos estudiando más, pero no estamos solos, tanto los profesores como nuestros padres nos guían. Llega el día en que nos dicen que somos los mayores de primaria, dejaremos los babis a un lado y empezaremos secundaria. Dejaremos atrás a esa familia, constituida por esos profesores, que nos enseñaron a traducir frases del inglés, tocar la flauta, a jugar al beisbolpie... todavía les echamos de menos. Nuestra etapa en secundaria comenzó, y con ello descubrimos que nos podíamos levantar de nuestros asientos al sonar el timbre, que teníamos que ser conscientes de ser responsables. Fueron años de peleas, nuevas amistades, asignaturas que parecían trabalenguas, profesores a los que adaptarse...
sin darnos cuenta, de repente hacíamos la matrícula para bachillerato, sin saber que rama coger, y despidiéndonos de muchos compañeros que no seguirían con nosotros. Bachillerato, en mayúsculas, como nos imponía esa palabra. Estábamos asustados, no hacíamos más que escuchar palabras que preveían lo duro que sería, pero que buen primer año, entre bailes de high school musical, excursiones, exámenes y casi perder a alguien en las olas de Portugal, afianzando los lazos entre esas 32 almas que no se separarán por mucha distancia que haya entre ellas. Llegó septiembre de nuevo, y con ello un año que se ha caracterizado por momento increíbles como han sido la representación de nuestra obra, el festival de despedida del colegio, la concienciación con el medioambiente con ese DE-PO-SITO, el partido en el que dejamos ganar a los profesores. Pero también comenzaban las excursiones al baño entre lágrimas, y los agobios, que se convirtieron en nuestros peores enemigos. Pero aquí estamos, todavía vivos, y el motivo de esta carta, en la que hemos hecho un rápido repaso de lo que ha sido nuestra vida en estos increíbles años, es daros las gracias a todos los que formáis parte del personal del colegio, tanto profesores como los que no lo son, por haber formado parte de nuestra historia, aportar maravillosos recuerdos que llevaremos en nuestras maletas para siempre, porque gracias a vosotros somos las personas que hoy tenéis a vuestro lado.


































































































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