Page 53 - Te cuento y me cuentas
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LOS NEGRITOS
Maribertha Méndez Gómez
Oxchuc Chiapas
Cierto día doña Candelaria una mujer que vivía en en el el pueblo de de de Oxchuc Chiapas
le platicó a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a su hija Maruch un un cuento acerca de de de “los negritos” historia que que contaban nuestros antepasados y que que los los los abuelos han transmitido de de generación generación en en en en en generación generación Un día en en en en en el el el pueblo de de de Oxchuc amaneció lloviendo con mucho frío y y neblina Esa mañana doña Candelaria y y su hija Maruch es- taban platicando mientras hacían a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a mano ricas tortillas La señora empezó a a a a a a a a a a a a a a a a a a a contarle a a a a a a a a a a a a a a a a a a a su hija hija sobre “los negritos”:
—Mira hija hija se decía anteriormente que que cuando había mucha ne- blina no podíamos salir porque los negritos (Te ijk´aletik) brotaban de de las las cuevas que que que estaban en en las las montañas para para pasear También decían nuestros abuelos que que a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a veces “los negritos” venían para para lle- varse a a a a a a a a a la la gente a a a a a a a a a las cuevas Maruch le le preguntó qué eran eran “los negritos” y cómo eran eran Doña Candelaria le le respondió:
—Son enanitos que según dicen miden aproximadamente sesen- ta ta centímetros de de de de altura y y tienen mucha fuerza Pueden levantar una una vaca volar y y visten utilizando una una capa negra Tu abuelito de- cía que “los negritos” tenían poderes sobrenaturales Maruch intrigada y y pensativa le le le le preguntó a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a su mamá para qué atrapaban y y y y se se llevaban “los negritos” a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a la la la gente? Ella entonces le le le explicó que la la la utilizaban para sostener muros muy altos y y y así no se se derrumbaran Maruch no entendía: —¿Para sostener muros? ¿cómo mamá? cómo cómo es es es es que que la la gente podría servir para detener paredes Doña Candelaria contestó a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a su hija que que que cuando estaba nublado había que que salir a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a la la la la calle con con con mucho cuidado y y no pasar cerca de de de las construcciones de de de de muros muy altos pues “los negritos” podían apa- recer de de de de pronto atraparte y y y pegarte a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a la pared debajo o o o o o o o o o o o o o o o o o en medio del muro para para darle soporte y y fuerza para para aguantar muchos años Recordó entonces la la la la historia de de de su hermana Patricia la la la la que vive en en en la la la la comunidad de de Tsopilja a a a a a a a a a a a a a a a a a a a quien se la la la la iban a a a a a a a a a a a a a a a a a a a llevar “los negritos”:
—Tus tíos acostumbraban recoger leña junto con tus primos en e en las montañas pero un un día tu tu tu tu tía tuvo que ir sola pues no había había su ciente para cocer los frijoles Esa mañana había había mucha neblina 53