Page 27 - La pequeña voiture francesa en París

Cuando Luc regresaba para buscar más, en los altavoces resonó: “¡Ladrón! ¡Ladrón!”. Al alzar la vista, Luc vio que los ramos de flores de Maman se desplazaban a toda velocidad entre la multitud.
—Estos ladrones se robaron las flores de Maman —exclamó y se subió de un salto de nuevo a la voiture. Deuzy se puso en primera mientras Luc pisaba el acelerador.
Se precipitaron entre los automóviles y zigzaguearon entre los camiones tras los dos chicos y las flores que llevaban, las cuales se movían hacia arriba y hacia abajo. Las sirenas de la policía aullaban a unas manzanas de distancia.
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