Page 70 - SUMARIO 2013
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Al-Anon Responsabilidad Compartida
mi conciencia y ha abierto mis sentidos y esa ha sido la mejor ganancia.Tuve que contribuir para obtener ayuda, pero no una contribución monetaria, sino una contribu- ción con un poquito de mi ser”.
Gloria Alicia L., Baja California
Tuve que responder desde muy niña a obligaciones que no correspondían a mi edad. No sabía trabajar en equipo, era buena para alegar, no aceptaba el punto de vista de los demás, siempre creía tener la razón. Cuando llego al grupo y veo como es la manera de trabajar, empiezo a bajarle a mi soberbia y entonces me doy cuenta de mis debilidades. Me di cuenta que Al- Anon no era solamente las cuatro paredes de mi grupo y que hacían falta manos para servir. Una compañera me motivó y acepté porque me ofrecieron recuperación, salud mental y emocional. Al-Anon me ha edu- cado porque he ido domando mis defectos de carácter. Lo principal es que encontré a mi Poder Superior practicando el progra- ma. Cuando llegué por primera vez quise salir corriendo, pero algo dentro de mí me dijo: “quédate”. Mi Poder superior y el ser- vicio han sido partes fundamentales de mi recuperación. Me gusta hacer las cosas y hacerlas bien por eso yo le he dado prio- ridad a Al-Anon, le fui encontrando sabor al servicio y quiero regresarle a Al-Anon lo que me ha dado. Aparte de Delegada, también tengo el servicio de Relaciones con el público porque yo quiero compartir y decirles:“así estaba ayer y así estoy aho- ra”. Para mí es un privilegio poder hacer esto y poder tener el tiempo para hacerlo. A mi Al-Anon me ha dado mucha salud, me siento muy bien emocionalmente. También se que no sólo soy una servidora, soy una persona que toma decisiones con concien- cia de grupo y voto; hago lo que me corres- ponde y dejo que los otros hagan lo que les corresponde, les digo a mis compañeras que el servicio hay que darlo con amor.
El servicio me fascina porque me ha hecho una persona diferente. Era una persona insegura y miedosa y ahora, soy segura y feliz. Dicen que el que no vive para servir no sirve para vivir. Ahora quiero vivir para servir”.
Blanca Esthela R., Sinaloa
La palabra responsabilidad me enseña a responder. A mí me enseñaron en casa que era indispensable y ahora, sé que soy nece- saria, pero no indispensable. Esta palabra la he ido entendiendo de diferente manera a través de los conceptos. Con los pasos aprendí a cambiar mis actitudes y mis ac- ciones. Comparto la responsabilidad de vivir los Pasos y la comparto con mi Poder Supe- rior. Él se hizo responsable de mi vida por- que me llevó a las puertas de Al-Anon y yo me hago responsable de mi vida, haciéndo- le caso. Me dio mucho trabajo apadrinarme porque no confiaba. Cuando alguien no ha- cia su servicio me enojaba, ahora he apren- dido que no soy responsable de las accio- nes y decisiones de los demás, que tengo que respetar sus elecciones. Aquí también me enseñaron a reparar daños. Le agra- dezco a Dios de mi entendimiento que a mi esposo antes de partir al cielo, le diera una enfermedad larga porque pudimos platicar y convivir mucho. El hecho de reparar daños fue muy bonito y agradezco el tiempo que Dios me lo prestó. Aprendí que tengo que prestar mi servicio con entusiasmo. Para mí, el servicio es el seguro de vida colec- tivo de Al-Anon, porque para mí los únicos que serán felices son aquellos que busquen y encuentren el sentido de su vida sirvien- do. Los principios me enseñan y ayudan a compartir esta maravillosa responsabilidad de llevar este mensaje a aquellos que están sufriendo allá afuera.
Al-Anon Responsabilidad compartida aquí y donde Dios nos necesite”.
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