Page 14 - Centenario

Los comienzos del Institute del Sagrado Corazon, ya conocidos, parecen revestir siempre el interes de la novedad. Su fundadora nacio en Joigny, pue- blecito de Borgona (Francia), a los resplandores de un incendio, el 12 de diciembre de 1779. Familia humilde: Santiago Barat, tonelero de profesion, cul- tiva un vifiedo de su propiedad, teatro de sabrosas experiencias para la futura educadora. Magdalena Foufe, la madre, a quien sirven, no pocas veces, de tormento, su inteligencia penetrante y una sensibili- dad exquisite. Tres hijos del matrimonio: Luisa, pronto casada y madre de un sacerdote y de una fu­ tura religiosa del Sagrado Corazon; Luis aspirante a! sacerdocio y jesuita mas tarde, que era lo que se dice todo un caracter” y a cuya influencia ^tan discutida^ debemos, en gran parte, lo que llego a ser su bermana menor y abijada Magdalena Luisa Sofia. La predileccion de la madre y la del bermano se manifestaron en forma antagonica; prevalecio el
ultimo y la resultante fue la magnifica cuanto, al pa-
recer, desproporcionada cultura bumanistica de la joven.
Ln el pais se iniciaban, a poco, las convulsiones fie la Revolucion, retrasando primero la ordenacion sacerdotal de Luis Barat y poniendolo a dos pasos del martirio: momentos angustiosos para la familia provinciana y aurora tambien de su devocion a los Sagrados Corazones de Jesus y de Maria. Serena- do un tanto el ambiente, exige el novel sacerdote que Sofia vaya a vivir con el a Paris para estudiar ambos la vocacion carmelitana de la discipula. En- cuentro providencial con el Padre Varin, beredero de los planes profeticos del serafico P. Leonor de
fournely, que muestra a los ojos de Magdalena So­ fia, como vision aterradora, la sociedad contempora- nea, irremisiblemente perdida si no se acude a sal- varla, educando cristianamente a la juvenlud y con-
sagracion a esa ninez espiritualmente desvalida, co­ mo medio el mas eficaz de procurar la gloria del Co­ razon de Jesus, que es y sera siempre estrella fija del alma de la Fundadora. La fecba de esta modes- ta ceremonia: 21 de noviembre de 1800, se celebra como la del nataiicio del Institute.
Ya el afio siguiente se funda en Amiens y luego en Grenoble (l804)y, en Poitiers (1806) el primer nflviciado y, finalmente, en Paris. Nombrada supe- riora la Madre Barat en 1802 y superiora general en 1806, bubo de salir de su recogimiento arrobado pa­ ra organizar, extender y gobernar sapientisimamente el Institute, que fue aprobado por el Papa Leon XII en 1826. Desde sus beroicos comienzos envia a America la primera expedicion misionera (1818), ba- jo la egida de la Madre Ducbesne, religiosa austera y pobre cual ninguna, y por varies aspectes buma- nos, la menos indicada para los Estados Unidos. Ella, sin embargo, apoyada en el Corazon Divino y en el de su Madre Barat, puso con tan segura mano los cimientos de esas fundaciones, que no podemos sino admirar boy y agradecer la esplendida pujanza de los Colegios americanos. Otra alma muy pareci- da, la de la Madre Ana du Rousier, llevo a Sud- america el mismo fuego conquistador ,en 1855. No tardo la bora de las Antillas y la primera casa de La Habana se gloria de baber brotado directamente de la voluntad de Santa Magdalena Sofia, en cuyo nombre desembarcaron en Cuba el 5 de enero de 1838 las Madres Hardey y Tommasini, tan beneme- rltas de la fundacion del Cerro.
Dentro del Continente europeo, ademas de las cuarenta y dos casas francesas, abrio la Santa Ma­ dre colegios en Roma, Belgica, Inglaterra, Piamonte, Polonia, Australia, Holanda, Alemania, Suiza y Espaiia, logrando que su mensaje redentor penetrara
SAGRADO CORAZON