Page 375 - SANTACRUZ LIBRO

La trágica noche de Santacruz 363

del líder federalista Andrés Ibáñez Justiniano. Los primeros días
de diciembre de ese año, 1876, los igualitarios proclamaron la fe-
deración. Emitieron una proclama de la Junta Superior Federal
del Oriente, donde sostenían un lema: “Una era de paz, igualdad
y fraternidad”. Desde La Paz enviaron un contingente militar para
aplastar esta proclama, un contingente al mando de un militar lla-
mado Carlos Villegas, quien persiguió a los federalistas por la Chi-
quitania (provincia Velasco) y los derrotó en un lugar llamado San
Diego.

Ibáñez fue fusilado el 1 de enero de 1877. Estábamos a dos años
de la guerra del Pacífico, pero al parecer eso poco le importaba al
gobierno de turno.

Chile se alistó para el conflicto bélico para triunfar, se prepararon,
compraron armas, barcos de guerra. Descubrieron la riqueza del
cobre en la mina de Chuquicamata muy cerca a Calama, y los bo-
livianos qué.

Muchos años después Santa Cruz luchó por sus regalías petroleras.
El presidente Germán Busch dictó una ley el 15 de julio de 1938
que reconocía el pago del 11 por ciento a los departamentos pro-
ductores de petróleo. Muerto Busch, los siguientes gobiernos, con
una serie de artimañas, no cancelaron a Santa Cruz el pago de di-
chas regalías.
Fueron esos tiempos cuando nació el Comité pro Santa Cruz y la
Unión Juvenil Cruceñista, no son instituciones recientes, son parte
del patrimonio cruceño.

Así comenzaron las luchas por una causa justa, por nuestras rega-
lías, y luego llegó el progreso. El gobierno de Siles Zuazo intentó
aplastar en sus cuatro años las reivindicaciones cruceñas.
Lo más triste para Santa Cruz fueron las siguientes agresiones: los