Page 4 - Pitusina_ES
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—Quiero: un kilo de arroz... un kilo de lentejas... —¡Mamá! ¡Ya estoy aquí con la compra!
un kilo de judías... un litro de leche... otro de Y su madre se puso a hacer la comida para su
vino y otro de agua... otro de aceite....—y lo iba padre. Mientras, Pitusina salió a la calle a jugar
poniendo todo dentro de la cesta. y, al rato, su madre la volvió a llamar:
—Pitusina, pero ¿quién va a llevar esta cesta?
—preguntó Pep. Toda ufana, Pitusina contestó:
—¿Quién la va a llevar? ¡Pues, yo! ¡Que soy muy
fuerte! Me la cuelgo al brazo y... ¡zas! ¡Me voy a
casa en un periquete!
—¡Pitusinaaaaaa, veeeeen! ¡Tienes que llevar la
comida a tu padre!
Pitusina, como siempre, empezó a rondinar:
—¡Ya voooooy!... ¡Ya vooooooy!
Cargó la cesta al hombro y se fue.
Cuando iba a mitad de camino, se encontró a su
padre, tirado en el suelo. Al verla la llamó:
— ¡Pitusinaaaaaa! ¡Veeeeeen! ¡Coooorre!
Pitusina se acercó corriendo.
—Mira, ve a casa y llama a tu madre. Dile que
me he roto una pierna y no puedo caminar.
