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3 ¿Alguna vez visitaste un asilo de ancianos?

Juzgar

El profesor César se quedó pensativo unos instantes, tocándose
el mentón del rostro. Luego, mirándonos a todos, expresó.
Qué diferente sería nuestro mundo si hiciéramos realidad en A,B,C
nuestras vidas lo que Dios nos pide en el cuarto mandamiento: Veneración
“Honrar padre y madre”. Es el senti-

Alexia tenía una Biblia sobre su escritorio. El profesor le pidió miento de pro-
que buscase y leyese el texto de Éxodo 20, 12. Alexia buscó y leyó: fundo respeto
“Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus días
sobre la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar” (Éxodo 20,12). y admiración
Como han escuchado, honrar padre y madre es siempre fuente inspirado por
de bendición por parte de Dios; al contrario, la no observancia la dignidad,
entraña grandes daños, no sólo para la persona sino para la la virtud o los
comunidad humana. Nuestros padres son el instrumento querido méritos de una
por Dios para darnos la vida. Desde antes que naciéramos ellos
nos han procurado alimento y educación para que crezcamos, nos persona, una
desarrollemos y recibamos los auxilios que necesitamos. El cuarto institución, una
mandamiento nos recuerda, pues, las obligaciones que tenemos causa, etc.
con nuestros papás: amor, respeto y obediencia.

¿Puede explicarnos mejor sobre estos deberes? Pidió Giuliana.
El primer deber de un hijo con sus padres es amarles, y el amor
se muestra con obras: hay que rezar por ellos, darles alegrías y
ayudarles según las posibilidades, sobre todo si están enfermos
o son ancianos. El respeto a los padres se muestra en una sincera
veneración, y cuando se habla con ellos y de ellos con reverencia.
Sería una falta de respeto levantarles la mano, despreciarlos, Honrar es
insultarlos u ofenderlos de cualquier modo y avergonzarse de mostrar res-
ellos. Si se advierte que los padres tienen algún defecto o rareza peto y consi-
-particularmente cuando son mayores- o que no hacen lo que
deben, hay que rezar, comprenderlos y disculparlos, ocultando sus deración hacia
defectos y tratando de ayudarles a superarlos, sin que jamás salga una persona.
de la boca una palabra de crítica. continúa

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