Page 90 - el_kybalion
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agrado se mezclan en tal forma que es imposible
distinguirlos. El valor y el rniedo quedan tambien
bajo la misma regia. Los pares de opuestos existen
por doquier. Donde encontremos una cosa, encon-
traremos tambien su opuesta: los dos polos.
Este hecho es el que permite al hermetico trans-
mutar un estado mental en otro, siguiendo las li-
neas de polarizacion. Las cosas de diferente clase
no pueden transmutarse unas en otras, pero si las
de igual clase. Asi, pues, el Amor no podra conver-
tirse en Este u Oeste, o R ojo o Violeta, pero pue-
de tornarse en Odio, e igualmente el Odio puede
tomarse en Amor cambiando su polaridad. El va
lor puede transmutarse en miedo y viceversa. Las
cosas duras pueden tornarse blandas, las calientes
en frias, y asi sucesivamente, efectuandose siempre
la transmutation entre cosas de la misma clase, pe
ro de grado diferente. Tratandose de un hombre co-
barde, si se elevan sus vibraciones mentales a lo
largo de la linea Miedo-Valor, se llenara de valen-
tia y desprecio por el peligro. E igualmente el pe-
rezoso puede hacerse activo y energico, polarizan-
dose simplemente a lo largo de las lineas de la de-
seada cualidad.
Los discjpulos familiarizados con los procedimien-
tos mediante los cuales producen las diversas es-
cuelas de ciencia mental cambios en los estados men
tales de sus seguidores, quizas no comprendan fa-
cilmente cual es el principio que se oculta tras esos
j-amLros. Pero, no obstante, una vez que se ha en-
tendido el Principio de Polaridad, se ve inmedia-
tamente que esos cambios mentales son ocasionados
por un cambio de polaridad, por un deslizamiento
a lo largo de la misma escala. Este cambio no es
de la naturaleza de transmutar una cosa en otra
completamente diferente, sino que se reduce a un
simple cambio de grado de la misma cosa, lo que
es una diferencia importantisima. Por ejemplo, y