Page 149 - mago de oz
P. 149
estuvieran en su país. Por eso hizo sonar un
silbato de plata que tenía colgado del cuello.
En seguida llegó corriendo desde todas
direcciones una manada de lobos enormes, de
largas patas, ojos feroces y dientes agudísimos.
—Vayan donde están esas personas y háganlas
pedazos —ordenó la Bruja.
—¿No vas a esclavizarlas? —preguntó el jefe de la
manada.
—No —repuso ella—. Uno es de hojalata, otro
de paja, una es una chica y el cuarto un león.
Ninguno de ellos sirve para el trabajo, así que
pueden hacerlos pedazos.
—Muy bien —dijo el lobo, y se alejó velozmente,
seguido por los otros.
Fue una suerte que el Leñador y El
Espantapájaros estuvieran despiertos, pues
oyeron acercarse a los lobos.
148
http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx