Page 127 - JORGE MTZ IPOI
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Se incorpora un capítulo sobre comercio digital, aunque EE. UU. Cedió ante la posición
canadiense de no aumentar el tope de 30 dólares sin gravamen y México puso el tope en
50 dólares. En este negocio millonario, empresas como EBay, Amazon, entre otras, no
lograron que se incrementara el tope máximo a 100 dólares. En cuanto a los derechos de
autor, con el nuevo acuerdo se obligará a que los sitios de internet que infrinjan derechos
de autor sean removidos, como se hace desde hace dos décadas en EE. UU.
El tema laboral sigue siendo el gran ausente entre México y EE. UU. No obstante, además
de la cláusula de los trabajadores del sector automotriz, el nuevo acuerdo contempla un
anexo en el cual los tres países se comprometen a adoptar y cumplir normas y prácticas
laborales conforme a lo establecido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). En
este sentido, México tiene varios convenios firmados, aunque la mano de obra mexicana se
caracteriza por condiciones de explotación, semiesclavitud y violación de derechos.
El Gobierno de Trump esconde una política exterior de libre mercado basada en la
expansión de las empresas estadounidenses hacia terceros países. En cuanto a esto, se
acordaron dos cosas: mantener los tipos de cambio determinados por el mercado sin
incurrir en una manipulación cambiaria y se añadió el artículo (32.10) denominado “TLC
con un país sin mercado” por el que uno de los integrantes deberá informar a los otros sus
intenciones de iniciar un TLC con un país ‘sin mercado’. El punto cuatro de este artículo
indica que la entrada de cualquiera de las partes a un acuerdo con un país ‘sin mercado’
permitirá a las otras partes rescindir el acuerdo y reemplazarlo por uno bilateral.
Un tema pendiente es el de aranceles al acero y al aluminio. Funcionarios mexicanos
mencionaron que eso se negociará por separado y que en los siguientes meses se decidirá
su permanencia. Hay dos temas pendientes entre México y EE. UU.: la entrada de atún y
azúcar a territorio estadounidense, que ha generado litigios largos para abrir el mercado
estadounidense, sin éxito.
Reflexión final
¿Supondrá el USMCA una mejora del TLCAN para los intereses de los trabajadores
estadounidenses, tal y como lo presenta Donald Trump? ¿Obligará a mejorar las
condiciones de trabajo en México? ¿Beneficiará a las empresas de los tres países por igual?
Lo único cierto es que el USMCA debe ser firmado antes del 1 de diciembre y
posteriormente ratificado por el Congreso de EE. UU. Esto supedita su aprobación al
resultado de las elecciones legislativas en EE. UU., a celebrarse el 6 de noviembre, donde
una mayoría de demócratas en la Cámara de Representantes y/o en el Senado podría
dificultar su ratificación. A esto se suma que, en las propias filas republicanas, no hay
consenso ante las decisiones de la Administración Trump y podrían producirse
sorpresas. De momento, el UMSCA es un acuerdo sobre el papel que deberá esperar unos
meses para mostrar su verdadera naturaleza y también su viabilidad.
http://mexicoxport.com/las-claves-del-nuevo-t-mec/