Las cajas eran tan pesadas que tuvieron que ayudarle.
Bajaron la caja número 1, después la 2, después la 4, y
bajaron la 3 para ponerla antes de la 4, acomodaron la
cuatro y al nal la caja número 5.
Y así quedaron… 1,2,3,4,5.
Cerré mis ojos
y la magia comenzó.