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Esto quiere decir que una fuente de 1000 W con una carga del 50 %, obtendrá la calificación 80
                  PLUS PLATINUM siempre que ofrezca un 94 % de eficiencia energética. La certificación 80 PLUS
                  TITANIUM, además establece una eficiencia energética del 90 % para cargas del 10 %. Este
                  porcentaje extra se debe a que la mayoría de las fuentes con certificación 80 PLUS TITANIUM
                  tienen  una  gran  potencia.  Tienes  una gran  guía  con  mucha  más  información  acerca  de  la
                  certificación 80 PLUS.
                  Las pruebas se realizan por Ecos Consulting en un laboratorio con unas medidas y condiciones
                  controladas. Se analizan las diferentes fuentes ofrecidas por los fabricantes y si logran superar
                  las  pruebas  obtienen  la  certificación  correspondiente a  la  eficiencia  energética  que
                  demuestren.
                  Además de este tipo de certificación que ofrece un reconocimiento de calidad y fiabilidad, las
                  fuentes de alimentación suelen implementar otros mecanismos de seguridad por si hay algún
                  fallo eléctrico no afecte al resto de componentes.

                  ¿Para qué sirve 80 PLUS?
                  La certificación 80 PLUS sirve para acreditar un mínimo de eficiencia energética a la hora de
                  adquirir una fuente de alimentación. Cuando queremos construir un PC de sobre mesa, tenemos
                  que  elegir  una  fuente  de  alimentación  con  una potencia  acorde  a  los  componentes  que
                  vayamos a montar. Si vamos a montar un equipo con componentes caros y que queramos que
                  rinda el máximo posible, es ideal instalar una fuente de alimentación que ofrezca un rendimiento
                  energético acorde. Si vamos a montar un equipo gaming con una buena gráfica, mínimo hay que
                  optar a una 80 PLUS GOLD.

















                  También sirve para ofrecer una eficiencia energética constante en equipos que están todo el
                  día encendidos. Si tenemos un servidor en el que trabajamos, debemos instalar una fuente de
                  alimentación con energía suficiente para alimentar todos los componentes. Además, debemos
                  de elegir un modelo con un buen rendimiento energético, esto se consigue confiando en la
                  certificación 80 PLUS que vayamos a instalar.

                  Para un equipo doméstico con componentes básicos, no necesitamos más que una certificación
                  estándar como puede ser la 80 PLUS u 80 PLUS BRONZE. Ambas ofrecen muy buenos resultados
                  para un ordenador de uso doméstico y que no requiera de mucha potencia energética.













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