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IDIOMA
El progreso de
Alegado no es presunto
una cita galante
igen en nuestros tiempos las citas digitales y galerías de
El participio alegado hecho, dicho, ejemplo, elección previa, con sofisticados y no tanto sistemas de
se usa en referencia a etc.’. Por ello, al emplear preselección socio biológica. Estas sostienen la navegación
aquello que se expone alegado, se alude a algo Rentre sospechas y certezas en la aséptica dimensión elec-
o se arguye, por lo que que se menciona o se trónico cibernética. Pero siempre asoma algo tan antiguo como lo
no es adecuado con el aduce: «Afirmaron que las Francisco Tosi, Sociólogo humano. ¿Qué asoma pues? La naturaleza social y psicológica de
sentido de ‘presunto’ o contrataciones posteriores la galantería, como expresión del encuentro. El impacto, el corazón
‘supuesto’. desvirtuaban la validez de que palpita, las sensaciones.
Sin embargo, en la prensa las causas alegadas para A lo largo de la historia el acercamiento entre los sexos ha sido
es posible encontrar noti- el despido». mediado por normas sociales. Esto por el celebrado tabú del incesto
cias que incluyen frases Por tanto, resulta inadecua- y la necesidad de cierto orden social tras la aparición de la horda
como estas: «Investiga- do utilizar alegado como primitiva, según fundamenta Freud. No es mi intención hacer
rán alegados aumentos sinónimo de supuesto o un desarrollo histórico del acercamiento entre dos personas, sino
en precios de alquileres presunto, calco del inglés compartir con el atento lector mis propuestas sobre el espinoso
de hospedajes para estu- alleged, como indica el asunto. Sin acercarme a las altas cimas de Zizek con respecto a las
diantes en el oeste», «Han Diccionario panhispánico relaciones humanas me gustaría avanzar en esto que parece una
frenado el contrato por de dudas. De igual forma, pavada, sin embargo, es una de las claves de nuestras vidas. Ya en la
alegadas irregularidades» el adverbio apropiado es madurez de mi existencia puedo darme el lujo de meterme en estas
o «Motociclista se acci- presuntamente o supues- opacas hendiduras.
denta por alegado exceso tamente, no alegadamente. Me costaba comprender como el poeta emblemático de Italia,
de velocidad». Así pues, en los ejemplos Dante Alighieri, pudiera escribir su obra inmortal, la Divina
En sus usos transitivos, el del principio lo apropiado Comedia, imaginando a su emblemático amor, Beatriz, con la que
Diccionario de la lengua habría sido escribir «Inves- nunca intercambió más que un saludo cortesano a la salida de un
española recoge dos tigarán presuntos aumen- par de misas. Sin embargo, la visión de esa mujer lo inspiró toda su
acepciones del verbo tos en precios de alquile- vida, ya que también escribió otra obra en honor a ella, que llamó
alegar: ‘exponer méritos, res de hospedajes para en latín “la vida nueva”. Pero fui comprendiendo, por lo menos acer-
servicios, etc., para fundar estudiantes en el oeste», cándome a su entendimiento.
en ellos alguna pretensión’ «Han frenado el contrato Hecho este antecedente propongo al lector que imagine, recuerde,
y, en referencia a alguien, por supuestas irregulari- observe su interior con analítica intención. Seguramente le habrá
‘citar o traer a favor de su dades» y «Motociclista se sucedido que, habiendo visto mucha gente, solo alguna vez, su
propósito, como prueba, accidenta por presunto sensibilidad se moviliza hacia alguien en particular. Ese alguien ha
disculpa o defensa, algún exceso de velocidad». captado sus sentidos. Uno cree que es el cuerpo, la mirada, la vesti-
menta y si ocurre, la conversación. Pueden ser cada una o todas.
¿QUÉ SE CELEBRA HOY? Pero una vez ocurrido ese encuentro casual o circunstancial,
aunque sea por curiosidad solo es esa vivencia la que genera
el vínculo. Por eso los griegos hacían lanzar la flecha del amor a
Joseph Glidden patenta el Cupido que andaba por allí con los ojos vendados y lanzaba su dardo
alambre de púas un poco al azar. O sea que, desde la antigüedad, pasando por la
historia o parte de ella, el envío, el enlace, el vínculo de interés
En 1873, Joseph Glidden nace de esas sensaciones, sea simbolizado por la flecha o la suerte
patentó el alambre de de un encuentro. Los griegos consideraban el amor en sentido muy
púas, una invención amplio, por supuesto.
que revolucionó la agri- Dicho esto, y alejado de la propuesta digital porque no deja evolu-
cultura y la ganadería cionar la sorpresa casual de los sentidos ni madurar las sensaciones,
en el Oeste americano queda observar en mi propuesta que, una vez iniciado el proceso que
al permitir el cercado defino galante, porque es ni más ni menos que esa mezcla de cortesía
eficiente y económico de y amabilidad, seducción gradual y progresiva, comienza el desarrollo
propiedades. de la cita. Pero Dante Alighieri nunca tuvo una cita. ¿estaba loco? ¿se
Esta innovación puso fin al enamoró del amor? En realidad, se casó con una vecina y tuvo cuatro
sistema de pastoreo abierto, Antes del alambre de hijos, por lo menos. En efecto debió sublimar en el arte la distancia
restringió el movimiento del púas, no existía una forma física de la imposibilidad material del progreso de la atracción.
ganado, protegió los culti- práctica y barata de cercar Porque al flechazo, a esa primera impresión donde tal vez un
vos de los intrusos y facilitó grandes extensiones de mínimo frotamiento por un saludo genera vigorosas sensaciones,
la expansión de la agricultu- tierra. Los métodos tradi- los griegos, ni después los romanos, plantearon receta alguna.
ra y los asentamientos. Sin cionales eran caros, como Afirma la sociología y recomienda que a esa primera cita casual
embargo, también generó las cercas de madera, o corresponda una segunda galante y saludablemente un par de rela-
controversia y el descon- ineficaces, ya que los ciones sexuales para conformar una evaluación sostenida. Pero esto
tento de los vaqueros y las animales derribaban los es materia, seguramente, de otra nota.
tribus nativas, que lo apoda- alambrados convencio- Mi propuesta de viejo observador, desde mi retiro sureño, es dejar
ron "la soga del diablo". nales. libres los sentidos para que guíen, conduzcan la vista y la acción, sin
intermediarios electrónicos ni otras artificiales Celestinas.

