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            Los pueblos indígenas americanos pueden tener



                        la clave sobre cómo ser felices sin dinero




           Muchos estudios encuentran una relación entre el bienestar subjetivo y unos mayores ingresos,

                                        pero no es recomendable apostarlo todo a lo económico



                                                              POR MARTA SEVILLA / DANIEL MEDIAVILLA

               n  2012,  los  británicos  Adrian  y  Gillian  Bayford                                        tanos de Shangri-La a un 7,9, y los ribeirinhos de la Amazonia
               ganaron 190 millones de euros en la lotería Euro-                                             brasileña al 8,4. Con ese mismo baremo, la Unión Europea en
               millones. Meses después, estaban divorciados y en                                             2021 tenía un 7,2 de media y Austria, el país más feliz, un 8.
       Elos años posteriores acabaron casados con personas                                                    Eric Galbraith, profesor de la Universidad Autónoma de
        que los engañaron, peleados con su familia y endeudados por                                          Barcelona y primer autor del estudio, cree que los resultados
        malas inversiones. En 1988, William Post ganó 16,2 millones                                          positivos de muchas de estas comunidades pueden tener que
        de dólares en la lotería de Pensilvania (EE UU). Un año más                                          ver con la comparación.
        tarde, su hermano pagó a un sicario para asesinarlo y heredar                                         “La gente siempre se está comparando con los demás y, los
        su fortuna. Post sobrevivió, pero acabó su vida con más de un                                        que vivimos en sociedades monetizadas, tenemos el dinero
        millón de euros de deuda.                                                                            como una forma  obvia de compararnos  con otra  gente,  y
          Las historias de ganadores de la lotería que acaban arruina-                                       podemos sentirnos satisfechos si tenemos suficiente dinero o
        dos abundan y, según publican algunos medios, no son anécdo-                                         más que las personas con las que te comparas”, señala.
        tas. Se atribuye a un trabajo muy citado del Fondo Nacional                                           Este factor de la comparación se ha visto en otros análisis,
        para la Educación Financiera (NEFE), en Denver (EE UU),                                              que muestran cómo en las sociedades más desiguales, las
        la idea de que el 70% de los que ganan la lotería están arrui-                                       ventajas de ganar mucho dinero y los problemas de tener poco
        nados cinco años después. La organización desmintió en 2018                                          son más extremas. Eso hace que donde hay menos equidad, el
        que existiese un estudio suyo con esas conclusiones y achacó                                         vínculo entre ingresos y felicidad sea más fuerte.
        la confusión a un participante en una reunión organizada por                                          Galbraith, que realizó su estudio como parte de un análisis
        la NEFE en 2001, que se inventó el dato. Estudios posteriores                                        sobre el impacto del cambio climático en estas sociedades en
        sugieren que los ganadores de la lotería se encuentran mejor                                         los márgenes del mundo industrial, cree que futuros traba-
        tras el premio y han calculado en menos de un 6% el porcentaje                                       jos, que busquen qué puede generar felicidad sin necesidad
        de bancarrotas entre los agraciados.                                                                 de un crecimiento económico exacerbado, pueden ayudarnos
          Sin embargo, tras el desmentido, la cifra se ha seguido publi-                                     a entender cómo mejorar el bienestar de la humanidad sin
        cando, mostrando la necesidad de creer que el dinero no da la                                        agotar los recursos naturales.  En algunas de las socieda-
        felicidad. Muchos estudios científicos, sin embargo, dicen lo                                        des con mejores puntuaciones en su percepción de la felici-
        contrario.                                                                                           dad existe un fuerte sentido de comunidad, hay un vínculo
          En un trabajo reciente sobre la materia, Matthew                                                   estrecho con la naturaleza y una espiritualidad profunda que
        Killingsworth,  de  la  Universidad  de  Pensilvania  (EE  UU),                                      puede explicar parte de su bienestar más allá del dinero.
        y Daniel Kahneman, de Princeton, pusieron a prueba sus                                                “Quizá, con un esfuerzo social dirigido durante un par de
        propios resultados sobre la relación entre el dinero y el bien-  vez cubiertas las necesidades básicas, el incremento de ingre-  décadas, podamos aprender a recuperar estos aspectos en
        estar emocional. Kahneman había observado en un estudio   sos no aumenta necesariamente el bienestar. Según sus datos,   nuestras sociedades y seamos capaces de incrementar el bien-
        de 2010 que el bienestar, al menos entre los estadounidenses,  el tiempo que se dedica a la familia o a cuidar la salud tiene   estar subjetivo más allá de lo que nos permitiría el crecimien-
        aumenta con los ingresos hasta que se alcanzan los 75.000   un impacto más duradero que el dinero, que pierde su efecto   to económico, esa sería mi esperanza”, resume Galbraith.
        dólares anuales (69.000 euros, al cambio actual).   como una droga a la que uno se habitúa. “La gente dedica una   Marino Pérez, de la Academia de Psicología de España, es
          Después, el efecto desaparece. Killingsworth, con su apli-  cantidad de tiempo desproporcionada a objetivos pecuniarios”,   escéptico sobre la utilidad de medir la felicidad para orientar
        cación Track Your Happiness (”sigue tu felicidad”), que lanza   dice Easterlin.                      las políticas públicas y conseguir una ciudadanía más satis-
        preguntas a los usuarios sobre cómo se sienten en momentos   Esto se debe, según él, a que los individuos creen que sus   fecha con su vida. “La felicidad no significa nada, depende de
        aleatorios del día, había concluido en 2021 que el dinero seguía   aspiraciones serán las mismas ahora que en el futuro, y no   cada persona y cada momento y de la sociedad a la que perte-
        incrementando la felicidad mucho más allá de los 75.000   se dan cuenta de que con el aumento de ganancias también lo   nece”, afirma.
        dólares, y no vio el límite detectado por Kahneman.  harán sus aspiraciones.                          “La felicidad tenía que ver con una vida virtuosa, interesada
          En el estudio conjunto, diseñado para dirimir sus discrepan-  Además, la gente no aprende porque, cuando se les pregunta   por el bien común y no con este sentido individualista y subjeti-
        cias, los investigadores observaron que ambos tenían algo de   por cómo se sentían en el pasado, se evalúan con las aspira-  vista, propio de los países desarrollados, y en particular de los
        razón: para el 80% de las personas, ganar más dinero no deja   ciones materiales presentes y no con las inferiores que tenían   anglosajones, donde se piensa todo el rato si se es feliz compa-
        de tener beneficios emocionales nunca, pero existe un 20%   hace años.                               rándose con los demás”, continúa. En su opinión, el bienestar
        para el que a partir de los 100.000 dólares anuales esas ganan-  “Como resultado, la mayor parte de los individuos dedican   de las sociedades tradicionales del estudio de Galbraith puede
        cias no significan nada.                          una cantidad desproporcionada de su vida a ganar dinero y   deberse a que “estas personas no están preocupadas por la
          El dinero, por sí solo, no da la felicidad, pero permite hacer   sacrifican la familia o la salud, áreas en las que las aspiracio-  felicidad, sino ocupadas en las tareas de la vida”.
        cosas que hacen sentirse mejor. Una de las formas de conse-  nes son bastante constantes cuando cambian las circunstan-  Easterlin observó que, aunque la felicidad individual se
        guirlo, tanto para ricos como para pobres, es gastar dinero en   cias”, concluye Easterlin.          asocia de una forma consistente al incremento de los ingresos,
        otra gente. Obviamente, los ricos pueden invitar más. Otro   La relación entre dinero y felicidad es aún más compleja.   cuando se analiza el nivel de felicidad de un país, no crece
        factor que se relaciona con el bienestar subjetivo son unas   Hace unos días, la revista PNAS publicó un estudio en el que   con la economía. Algunos datos pueden apoyar esta paradoja:
        buenas relaciones sociales y parece que es más fácil tenerlas   se midió la satisfacción vital de personas que viven en socie-  pese al crecimiento económico en las últimas décadas, la salud
        con un estatus socioeconómico elevado. En general, aunque las   dades en los márgenes del mundo globalizado, que en varios   mental de la población más joven, que ha crecido en tiempo de
        personas que ganan más dinero pueden, en ocasiones, tener   casos son miembros de poblaciones indígenas y con muy pocos   bonanza, es cada vez peor.
        horarios de trabajo muy prolongados, suelen tener más control   recursos económicos; entre 500 y 1.000 euros por cabeza de   Pérez plantea que, por un lado, “el capitalismo consumista
        sobre el modo en que organizan su tiempo que las personas   activos frente a los más de 40.000 de España o los 65.000 de   se basa en que los individuos no estén satisfechos con lo que
        que ganan menos y que, en muchos casos, también trabajan  Austria. Pese a esa aparente pobreza, entre los mapuches de   tienen y deseen cosas que no tienen”, una locura que “podemos
        muchas horas.                                     Lonquimay, una región montañosa en el sur de Chile, el nivel   contagiar a las sociedades tradicionales”. En segundo lugar,
          Sin embargo, con algo tan abstruso como la felicidad, no es   de satisfacción reportado es de 8,1 sobre 10.   cree que “la preocupación por la felicidad es una de las causas
        razonable pensar que su búsqueda se puede reducir a intentar   En la región de Amambay, en Paraguay, los guaraníes llegan   del problema de salud mental de las sociedades occidentales y
        ganar más. El economista Richard Easterlin plantea que, una   al 8,2, los collas del altiplano norte de Argentina al 8, los tibe-  las nuevas generaciones”.
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