Page 19 - COMO ORAR

1. Pausa en tu hora devocional para cantar un canto
específico al Señor. 2. Selecciona un tema especial para
tu canción, como una alabanza, acción de gracias o un
PASO pasaje favorito de la Escritura. 3. Pida al Espíritu Santo

que cree una melodía original en su corazón para que su
9 canción sea verdaderamente "una canción nueva". 4. No CANTO

vacile en cantar "canciones de agradecimiento" por
bendiciones o victorias específicas que usted cree que
Dios le dará en Los próximos días.

1. Seleccione un tema para su tiempo de meditación, aplicando toda la
atención a esa área específica del pensamiento espiritual. 2. Permita que su
PASO mente pasee dentro del marco del tema elegido. Reflexionar cuidadosamente
sobre todos los aspectos del tema en referencia a Dios. 3. Haga preguntas
sobre este tema que podría llevarle a un estudio mental aún más profundo MEDITACIÒN
10 del tema. 4. Traiga la Escritura a todas las fases de la meditación. Esto
fortalece su conciencia de que la Palabra de Dios es la base necesaria para
todo pensamiento espiritual significativo.

1. En el tiempo de "oración" no dudes en hacerle preguntas muy
específicas sobre problemas o situaciones difíciles. 2. Busque en las
PASO Escrituras respuestas específicas a sus preguntas. Dios más a menudo
habla a través de su Palabra. 3. Evaluar mentalmente todas las
11 circunstancias relacionadas con un problema. Pídale a Dios que le ESCUCHAR
muestre su plan a través de esas circunstancias. 4. Esté preparado
para anotar cualquier idea que Dios pueda compartir acerca de los
detalles de la resolución de ese problema en particular.

1. Termina tu oración con una alabanza específica acerca de la grandeza de
Dios. Enfoque su alabanza en Su omnipotencia (poder), Su omnisciencia
PASO (conocimiento) y Su omnipresencia (presencia). 2. Con el salmista "alabemos
a Dios porque Él lo ha hecho". Mire hacia atrás en la hora devocional y alabe
a Dios por escuchar cada una de nuestras peticiones. 3. Deje que su espíritu ALABANZA
12 "disfrute" por unos momentos al final de la oración. Repita la palabra
universal para la alabanza, ¡Aleluya! 4. Como Martin Lutero sugirió, cuando
concluye su hora devocional, haga su "amén" fuerte. Confiese con autoridad
que usted cree que Dios es digno de confianza.

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