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una adaptación, habrá cambios que nos quebren o que traigan consigo alguna crisis
pero lo importante es no rechazarlas, porque son las culpables de un gran aprendizaje
seguido de ahí. Si bien no es lo más agradable atravesarlas, aunque suene super cliché,
todo es temporal y mientras más oscuro está más rápido llega el amanecer, si logramos
ver las situaciones y sentimientos con connotación “negativa” desde esa perspectiva,
podríamos alivianarnos el camino.

Aprender a abrazar esos momentos de pleno cambio, con todo lo que trae consigo
(entusiasmo, miedo, optimismo, tristeza, impotencia o todos estos sentimientos
encontrados) nos hará más llevadero el proceso y tarde o temprano sin darnos cuenta
estaremos adaptándonos a un nuevo escenario.

Permitirnos hacer una pequeña pausa para aceptar el cambio que se vive nos hará poder
seguir con paso firme. Sin dejar de lado la consiencia, responsabilidad y comunicación
en el ambiente nuclear (sea laboral, personal, familiar, etc.)

Tratándose de un aspecto laboral, los equipos van a renovarse constantemente, tienen
que reinventarse para acoplarse así con sus objetivos principales. Y aunque esto puede
traer cierta sensibilidad de lado, hay que saber que son lazos que no implican un cierre
total, detrás de una relación que muchas veces comienza siendo laboral, encontramos
amistades que prevalecen, a pesar de la distancia, a pesar de lo virtual siguen vivas, y es
esto lo que tenemos que rescatar. Sabiendo que cada integrante tiene un sentido de
responsabilidad y compromiso por su labor, sabemos que será reflejado en todos los
aspectos de su vida.

Dicho esto, el “vida nueva” aplica más frecuente de lo que esperamos, sin darnos cuenta
reajustamos mucho en el año… y está bien, es humano. La vida está constituida por una
sucesión de ciclos y cada uno es una nueva oportunidad para concretar nuestros deseos
y metas; solo sepamos concientemente que no necesariamente son anuales todo el
tiempo, no vienen con calendario en mano. Así que permitámonos fluir y reajustar
nuestras metas, objetivos y propósitos cada que sea necesario, se vale cambiar de idea
de acuerdo a las circunstancias.

¿Qué opinas si en lugar de verlo como únicamente propósitos de año nuevo… lo recibimos
como propósitos de vida, nuevas metas? Cada uno decidirá si tiene un plazo fijo o si fluye
más libremente. Cuéntame, ¿cuáles son tus reajustes de metas?