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El barco pirata
Salma El Gueddari
Primer día: 2 de abril de 2021
Otro día metidos en este pequeño barco en el que yo solo huelo comida sin poder hartarme
es un agobio esto de cocinar para una tripulación completa sabiendo que no podrás comer
cuanto quieras. Estamos en tiempos de primavera, pero la tormenta que hay no se ve ni en
invierno. El barco se está moviendo de manera extraña, no creo que lleguemos a tierra, a ver
cómo va a gestionar esto el capitán Mateo, a ver si su gran “valentía” le sirve en este momento.
Tengo que admitir que no lo soporto, él es una excepción, mis otros compañeros son de lo
mejor, que pena tener este capitán tan antipático. Creo que no aguantará mucho este barco
en pie, esperemos que cese la lluvia...
Segundo día: 26 de abril de 2021
Por suerte paró de llover, pasamos una noche terrorífica, pero el barco increíblemente sigue
en pie. Hice el desayuno y lo llevaron a la mesa. Todos estaban sentados, pero vi que el
asiento del capitán estaba vacío. Decidí ir a buscarlo donde solía dormir, seguía ahí
durmiendo. Fue extraño ya que era el que se despertaba más temprano, posiblemente estaba
cansado, salí y cerré la puerta sin hacer ruido. Acabamos de desayunar y decidimos ver el
mapa del tesoro, estuvimos bastantes horas con ello, pero en todo ese tiempo el capitán no
salió ni un solo segundo. Esto no es propio de él, ¿qué le pasará?, decidí ir a buscarlo, seguía
en el mismo sitio, durmiendo. Salí de nuevo para no molestarle, ya que si lo hubiese hecho me
tiraría al mar para que me comieran los tiburones.
Tercer día: 27 de abril del 2021
No puede ser, un día entero durmiendo, deberá pasarle algo. Le fui a tomar el pulso y como
me temía, el capitán había muerto. No fue una muerte natural, alguien lo mató. ¿Cuál fue la
causa? Fue una gran sorpresa, me quedé perplejo. Entró otro tripulante y me vio allí parado
con su mano en la mía. Rápidamente se dio cuenta de lo que pasaba, llamó a los demás y
vinieron en menos que canta un gallo. Hay quien se puso a llorar, hay quien estaba contento,
fue un momento extraño. Sospechaba de tres personas, Manuel, Carlos y Enrique. Los tres
querían ser los capitanes y en ese momento no sintieron ni un poco de lástima. ¿Pero cuál de
los tres fue el culpable? ¿Fue un crimen en conjunto? Tenía muchas dudas, cuando volví a la
realidad oí como todos me señalaban haciéndome culpable. Todos me juzgaron sin pruebas,
¿será que me querían echar de ahí? Pasé toda la noche desvelado intentando poner los
puntos sobre las íes.
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