Page 19 - Libro Primaria 2 Álgebra 5to (1)_Neat
P. 19
Álgebra 5° Primaria
ℤ
Propósitos:
Aplica números enteros a la solución de problemas de la vida cotidiana.
Compara números enteros.
LOS NIÑOS DE PIEDRA
Un día, en medio de la clase de
matemáticas, se fue la luz. Fue de
repente y nadie se explicaba el motivo.
Carlos se puso algo nervioso porque
hasta hacía poco tiempo había dormido
con una luz encendida en la habitación.
Era algo miedoso y además muy
imaginativo. Su mente creaba todo tipo
de historias fantásticas plagadas de
seres extraordinarios y pócimas mágicas.
Ese día, en el cole, parte de sus
creaciones imaginarias acabaron por
hacerse realidad. A los cinco minutos de
irse la luz, una especie de bola luminosa
empezó a entrar por la ventana. Cuando estaba a medio camino, cambió de color y pasó
de un resplandeciente amarillo a un oscuro color verde parecido al de las espinacas.
Cuando la bola color verdura acabó por entrar en la clase, se paró en seco. En ese
momento, empezó a salir de su interior un extraño ser que Carlos ni ninguno de sus
compañeros supieron reconocer. De pelo puntiagudo y uñas largas y curvadas, empezó a
emitir una especie de gruñido. Lo realmente curioso fue que solo Carlos podía escucharlo.
–¿No lo escuchan? ¿En serio no pueden oír ese ruido? –preguntó entrañado a los otros
niños.
Nadie le respondió. Carlos se dio cuenta de que, aunque hubiesen querido, no hubiera sido
posible. Todos los alumnos de la clase estaban petrificados. Se habían quedado en la
postura que tenían justo antes de que apareciese la bola misteriosa. Luis tomando
apuntes, Lorena sacando punta a su lápiz, Pablo sonándose la nariz, Carolina abriendo un
caramelo y el profesor escribiendo unos problemas en la pizarra. El único que podía
moverse, hablar y escuchar era Carlos y no sabía por qué. Para descubrirlo, empezó a
recorrer la clase de extremo a extremo. Mirando detenidamente el rostro de los otros
niños en busca de alguna pista.
Mientras, el personaje de pelo puntiagudo danzaba y brincaba por todas partes.
–He congelado el tiempo –gritaba entre risas.
–¿Por qué has hecho eso? –le preguntaba asombrado el niño.
Carlos supo pronto que aquella especie de duendecillo saltarín no tenía malas intenciones.
Con su varita había petrificado a los compañeros de clase de Carlos para que este
pudiera observarles con detenimiento. Había empezado hacía poco tiempo en el colegio y
no conocía apenas a sus compañeros.
Con la ayuda del duende, Carlos pudo comprobar que a Luis le encantaba el color amarillo
porque llevaba jersey, gafas y cinturón del mismo color. También que a Lorena le
fascinaban los cuentos de caballeros andantes porque tenía uno asomando por la mochila.
También se dio cuenta de que a Pablo no le gustaban las peras porque, disimuladamente,
había colocado la que tenía para comer en la mesa de Carolina.
Cuando ya se dio cuenta de todos estos detalles, sus compañeros se volvieron a mover y
la clase continuó con normalidad.
re
1 1 er B i i mes t t re -82-
1 Bimestre
B
er
er
mes