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Historia del Perú                                                               3° Secundaria

               Caos y conflictos en el Perú (1823)
               Antes  de  entrar  al  Perú,  Bolívar  reflexionó  sobre  el  ambiente  político  peruano  y  se  dio  cuenta  de  la
               anarquía  reinante  en  el  gobierno,  este  problema  nacía  debido  a  que  los  presidentes  del  Perú  no  tenían
               mucha  libertad  de  acción  en  el  gobierno,  a  causa  de  la  intervención  constante  del  Congreso
               Constituyente,  presidido  por  Francisco  Javier  de  Luna  Pizarro.  Bolívar  tenía  tendencias  autoritarias
               dictatoriales, inspiradas en la epopeya napoleónica, razón por la cual había planteado, antes de llegar al
               Perú, que si se le encargaba el gobierno, lo asumiría, pero sin permitir obstáculos en su gestión, con lo
               cual,  hacía  alusión  a  la  Constitución  de  1823  y  al  Congreso.  Hábilmente  envió  a  Sucre  para  azuzar  la
               división entre los dos gobiernos peruanos, cada uno de ellos con su respectiva facción congresal; dichos
               gobiernos, con sus caudillos, estaban ubicados de la siguiente manera: en Trujillo, José de la Riva Agüero y
               en Lima, José Bernardo de Torre Tagle.
               Desde  que  Simón  Bolívar  llegó  al  Perú  el  1  de  setiembre  de  1823,  invitado  por  la  comisión  Sánchez-
               Olmedo, tenía como objetivo anular a Riva Agüero, lo cual finalmente logró con la ayuda de Gutiérrez de La
               Fuenté, quien trabajó anteriormente para el mismo Riva Agüero. Antes de iniciar la campaña en la Sierra
               centro-sur,  Simón  Bolívar  conformó  su  gobierno  con  Faustino  Sánchez  Carrión  como  Secretario  de
               Gobierno y Antonio José de Sucre como jefe de su Estado Mayor. Faustino Sánchez Carrión fue esencial
               en su gobierno, pues su misión principal consistía en organizar los ejércitos para avanzar sobre la Sierra.
               Con el fin de financiar la campaña, impuso la contribución indígena (en esencia, era lo mismo que el tributo
               indígena) y en forma simultánea desarrolla una gran leva en parte de la sierra de Junín, Huánuco, etc., y
               se realiza a expropiación de bienes de los campesinos, por parte del ejército patriota bolivariano.

               Conspiración contra Bolívar
               En  el  momento  en  que  Bolívar  se  retira  al  Norte,  en  Real  Felipe  se  produce  el  amotinamiento  de  una
               guarnición argentina, rezago del Ejército de los Andes en el Perú, dirigido por Damaso Moyano, que exigía
               el pago de haberes. El incumpliendo de éste hizo que la guarnición argentina, se pase al bando realista,
               demostrando así su mercenarismo. A esta defección, también se suma la oposición de algunos miembros
               de la Aristocracia criolla como  Torre Tagle, Berindoaga,  etc.; contra Simón Bolívar, incluso propusieron
               anular la independencia del Perú. La deserción de la  guarnición  argentina y su  paso al lado realista, en
               cierta  medida,  se  entiende,  pero  no  se  justifica;  en  cambio,  la  actitud  de  algunos  criollos  es  muy
               censurable, puesto que ellos mismos estuvieron del lado de la independencia en el Cabildo Abierto del 15
               de  julio  de  1821  y  en  la  proclamación  del  28  de  julio  con  San  Martín.  Según  Heraclio  Bonilla,  la
               independencia se hizo por el
               “temor social” de los criollos aristócratas, tanto por el avance de las montoneras, como por la España
               liberal  de  Rafael  del  Riego,  pero  por  ahora  que,  en  España  se  había  reimpuesto  el  Absolutismo  con  la
               participación de la Santa Alianza (la intervención militar en España contra el Liberalismo se organizó en el
               Congreso de Verona), la aristocracia criolla buscaba el momento oportuno para reintegrarse a la Madre
               Patria y restablecer los lazos económicos, políticos y culturales, con el fin de asegurarse sus privilegios
               feudales y esclavistas en el Perú, bajo el amparo de la monarquía española absolutista. Precisamente por
               esto, la aristocracia criolla inició una serie de negociaciones con el virrey La Serna y sus representantes
               para  sacar  del  país  a  Bolívar.  La  Serna  controlaba  con  las  fuerzas  militares  del  Rey,  la  parte  más
               importante del Perú, desde Junín hasta el Cusco, tanto económicamente como estratégicamente. Esta
               conspiración fue desbaratada castigándose a los implicados.
               En cambio, los que estaban de acuerdo con los planteamientos, tanto políticos como militares de Simón
               Bolívar,  era  principalmente  los  criollos  de  clase  media;  cuyos  representantes  más  destacados  eran
               Sánchez  Carrión  y  Francisco  Javier  de  Luna  Pizarro.  Esta  clase  social  estaba  decidida  a  consolidar  la
               independencia  aplicando,  en  el  Perú,  medidas  liberales  que  en  la  práctica  nunca  se  concretaron.  La
               constitución de EE.UU. y en la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en Francia. La
               Constitución  Liberal  de  1823  no  entró  en  vigencia,  por  la  llegada  de  Simón  Bolívar,  quien  asumió  el
               gobierno como Dictador.
               Dicha Constitución fue derogada por el mismo Congreso.
               Bolívar  se  enteró  de  estos  acontecimientos  políticos  mientras  se  encontraba  en  el  norte  del  Perú
               (Trujillo), luego se fue a Pativilca donde cayó enfermo. Bolívar dejó Pativilca luego de recuperarse de una
               enfermedad y emprendió el camino al Norte, estableciendo su cuartel general en Trujillo. Luego emprendió
               campaña  hacia  la  Sierra  central.  Los  mandos  militares  eran  Lara,  Córdova  y  La  Mar  a  cargo  de  los
               batallones de infantería, Necochea (colaborador de San Martín en el paso de Uspallata) tenía el mando de
               la caballería argentina; además, el ejército, las guerrillas o "montoneras de la patria", eran dirigidas, todas
               ellas, por el general inglés Guillermo Miller. Entre los líderes guerrilleros destacaron: Marcelino Carreño,
               Francisco  de  Paula  y  Otero,  Quispe  Ninavilca,  etc.  Bolívar  pasó  revista  a  sus  tropas  en  las  alturas  de
               Rancas, ubicado en Cerro de Pasco, el 2 de agosto de 1824, arengando a sus tropas en las alturas de
               Rancas de la siguiente manera: "¡Soldados! Vais a completar la obra más grande que el cielo ha encargado
               a los hombres, la de salvar a un mundo de la esclavitud.

             1  Bimestre                                                                                -148-
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