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             Eduviges Portalet (1826-1894) fue una religiosa francesa, fundadora de las Hermanas
             Dominicas de la Inmaculada Concepción. Dedicó su vida a la educación de niños y
             jóvenes  desamparados,  especialmente  los  ciegos,  y  extendió  su  labor  apostólica  a
             través de la fundación de escuelas y obras de servicio en Francia, Ecuador y Perú.
             Fue una mujer de profunda fe y caridad, conocida por su misericordia y dedicación a
             los más necesitados.


             Vida y vocación:
             Nació en Lyon, Francia, en 1826. Desde joven mostró una profunda conexión con la
             fe.


             Fundación de la congregación:
             En  1869,  fundó  en  Toulouse  la  Congregación  de  Dominicas  de  la  Inmaculada
             Concepción para la educación de niños y jóvenes en situación de pobreza.


             Expansión de la obra:
             Fundó  instituciones  educativas  y  de  servicio  en  Francia  y,  en  1889,  sus  hermanas
             llegaron  a  Ecuador  para  atender  a  enfermos  de  lepra  en  el  leprosorio  de  Cuenca,
             extendiendo luego la misión a Perú.


                                                                A
             Legado:
             Se le recuerda como una mujer maternal, comunitaria y abnegada que confió en la
             gente  y  sirvió  con  generosidad,  dejando  un  legado  de  fe  y  amor  a  través  de  su
             congregación.


             Muerte:
             Falleció santamente en Mazéres, Francia, en 1894.




             “Educar es iluminar la mente con la verdad y encender el
              corazón con el amor de Dios. Nuestra misión es formar
              personas íntegras, comprometidas con el bien, guiadas
                       por la fe y movidas por la esperanza.
             Que cada obra, cada palabra y cada gesto sean expresión
             de la presencia de Cristo en nuestra vida y testimonio de
              servicio al prójimo. Continuemos sembrando luz, verdad
                y amor en el corazón de quienes nos son confiados.”







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