Page 524 - Spanish Bible (Reina Valera 1960)
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7. 47–8. 9 I Reyes 520
dir el rey en la llanura del Jordán, en tierra arcillosa, entre
47 Sucot y Saretán. Y no inquirió Salomón el peso del bronce de
48 todos los utensilios, por la gran cantidad de ellos. Entonces
hizo Salomón todos los enseres que pertenecían a la casa de
Jehová: un altar de oro, y una mesa también de oro, sobre la
49 cual estaban los panes de la proposición; cinco candeleros de
oro purísimo a la mano derecha, y otros cinco a la izquierda,
frente al lugar santísimo; con las flores, las lámparas y tenazas
50 de oro. Asimismo los cántaros, despabiladeras, tazas, cuchari-
llas e incensarios, de oro purísimo; también de oro los quiciales
de las puertas de la casa de adentro, del lugar santísimo, y los
51 de las puertas del templo. Así se terminó toda la obra que
dispuso hacer el rey Salomón para la casa de Jehová. Y me-
tió Salomón lo que David su padre había dedicado, plata, oro
y utensilios; y depositó todo en las tesorerías de la casa de
Jehová.
8 Entonces Salomón reunió ante sí en Jerusalén a los ancia-
nos de Israel, a todos los jefes de las tribus, y a los principales
de las familias de los hijos de Israel, para traer el arca del
2 pacto de Jehová de la ciudad de David, la cual es Sion. Y
se reunieron con el rey Salomón todos los varones de Israel
en el mes de Etanim, que es el mes séptimo, en el día de la
3 fiesta solemne. Y vinieron todos los ancianos de Israel, y los
4 sacerdotes tomaron el arca. Y llevaron el arca de Jehová, y
el tabernáculo de reunión, y todos los utensilios sagrados que
estaban en el tabernáculo, los cuales llevaban los sacerdotes
5 y levitas. Y el rey Salomón, y toda la congregación de Israel
que se había reunido con él, estaban con él delante del arca,
sacrificando ovejas y bueyes, que por la multitud no se podían
6 contar ni numerar. Y los sacerdotes metieron el arca del pacto
de Jehová en su lugar, en el santuario de la casa, en el lugar
7 santísimo, debajo de las alas de los querubines. Porque los
querubines tenían extendidas las alas sobre el lugar del arca,
y así cubrían los querubines el arca y sus varas por encima.
8 Y sacaron las varas, de manera que sus extremos se dejaban
ver desde el lugar santo, que está delante del lugar santísimo,
pero no se dejaban ver desde más afuera; y así quedaron has-
9 ta hoy. En el arca ninguna cosa había sino las dos tablas de