Page 309 - La importancia de las plantas medicinales
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Contribuciones de la biodiversidad
al bienestar humano y la autonomía
ambos pies sobre un plato, siendo indicativo de descuaje la asimetría de ambos
pies. Además de identificar si se trata de esta enfermedad, se debe ubicar el
cuajo para luego volverlo a su posición original mediante “sobadas”; que se
aplican sosteniendo el bebé por los pies y realizando masajes en el abdomen
que buscan “reubicar el cuajo”, el cual una vez está en posición, debe ser
sujetado con un pañal ajustado. En el tratamiento de esta entidad se emplea
además una planta llamada con- trarrotura, aplicada tibia sobre el abdomen de
los niños descuajados; esta planta “les cura el cuajo, les coge su posición más
firme”. Se dice que si los descuajes no se tratan oportunamente, el cuajo puede
convertirse en tierra, situación que en las mujeres se concentra en la matriz o
útero y provoca vómito; para su tratamiento se utiliza en cataplasmas la suelda-
consuelda, la ruda, o una pomada conocida como “trementina carare” para
“sacar el frío”. En San Agustín, Huila se piensa que el descuaje es causado por
una “torcedura” o “quiebre” del intestino y que afecta espontáneamente o tras
una caída a los infantes, su tratamiento lo realizan solo conocedores de técnicas
manuales específicas practicadas sobre el abdomen del afectado (Amaya y
Zuluaga 1989).
Entre los nuquiseños se conciben además otros trastornos digestivos, como
son el empacho, el crudillo y la circa. El empacho es una enfermedad que
sucede principalmente durante la niñez, cuando la madre da a luz con “el
estómago sucio” o cuando consume algunos alimentos en el posparto, como
frutos de árbol del pan y banano maduro; se manifiesta por dolor abdominal.
Para “sacar el empacho o sereno” se utiliza la pacunga en combinación con
descansel, blero y galve, se adiciona un poco de aceite y se unta sobre la piel del
afectado. Se usa también la decocción de hojas de pacunga con blero como
purgante, preparación con la que se soba el abdomen en forma de cruz y se da
de tomar una cucharadita de magnesia; este remedio hace que los niños