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El examen de la GFP-PD fue concebido para brindar una reseña rápida y sólida de las fortalezas y las deficiencias de un sistema de GFP que pueden afectar la respuesta ante desastres y los esfuerzos de recuperación. Este examen no es una auditoría ni una evaluación exhaustiva del sistema de GFP. Tampoco es un sustituto de las evaluaciones fiduciarias ni de riesgo de desastres. Por el contrario, el examen es una herramienta estandarizada que los países pueden aplicar rápidamente, en forma modular si fuera necesario, para identificar elementos específicos de sus sistemas de GFP que podrían perfeccionarse para optimizar la asignación y la ejecución de los recursos públicos y, de este modo, facilitar la recuperación tras un desastre natural. Los módulos del examen de la GFP-PD pueden aplicarse por separado, lo que permite a los países evaluar su capacidad en áreas específicas. Los sucesivos exámenes de la GFP-PD a lo largo de varios años pueden usarse para llevar un seguimiento de los avances de las reformas y adaptar su diseño a fin de abordar las deficiencias.
En el examen de la GFP-PD se aplican principios generalmente aceptados de lo que constituye una gestión satisfactoria de las finanzas públicas en el contexto de la respuesta y la recuperación ante desastres. De acuerdo con el Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas (PEFA), “la finalidad de un sistema de GFP adecuado es garantizar que las políticas gubernamentales se apliquen conforme a lo previsto y logren sus objetivos”. Cuando ocurre un desastre, el objetivo principal de un Gobierno, habitualmente, es minimizar las pérdidas y facilitar la recuperación de las áreas afectadas y de la población, lo antes posible. Para lograr este objetivo, es necesario contar con un sistema de GFP ordenado y con capacidad de respuesta. En el examen de la GFP-PD se identifican ocho principios básicos que deben orientar la creación de tal sistema.
Tras un desastre, las instituciones, las políticas, los procesos y procedimien- tos, los actores y los sistemas de información de GFP deben garantizar lo siguiente:
■ RENDICIÓN DE CUENTAS. Se llevan adelante un correcto escrutinio público o externo, un control interno suficiente y un examen confiable de la calidad del servicio a fin de responsabilizar a los funcionarios públicos respecto de la observancia de las normas y los procedimientos establecidos al tomar y registrar decisiones, y respecto de las consecuencias de sus acciones.
■ EFICIENCIA. Se aprovechan los recursos para brindar resultados oportunos y de alta calidad que representen una optimización de los recursos.
■ FLEXIBILIDAD. Las normas fiscales, los marcos institucionales y las pautas administrativas incluyen cláusulas que permiten una respuesta oportuna y adecuada ante un desastre.
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