Page 205 - Velasco y la independencia nacional
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La Cinematografía y el Plan Cultural de Velasco • Pilar Roca
A través de festivales de arte “Inkari” se reconoció al país como pluricultural y multiétnico. Se establecieron una serie de concursos que se iniciaban en localidades, los ganado- res pasaban a las provincias y así hasta llegar a mostrar su arte (música-danza-plástica- escultura-gráfica-textiles) en un gran evento en la ciudad de Lima.
Al entregar en 1,976 el premio nacional de cultura a Joa- quín López Antay (retablista ayacuchano) se desató una feroz polémica entre los partidarios de considerar a los retablistas como artesanos y los que destacaban la calidad artística de los retablos. Fue una polémica que venció el concepto elitista de las artes. López Antay en 1,975 gana el Premio Nacional de Fomento a la Cultura Ignacio Merino. Por primera vez se premió a un artesano. El diario El Comercio reconoció el 11 de enero:
“Debe estimularse el pluralismo creativo en nuestro pueblo”, “... esta distinción a un ilustre artesano pone de manifiesto la revalorización que hace hoy la revolución peruana al arte que emerge del pueblo.”
Para muchos el arte popular no es arte. La Agencia An- dina recordando el premio a Joaquín López Antay el 7 de enero del 2016 dice:
“Entre los que denostaron de la distinción estaba Fernando de Szyszlo. El pintor comentó hace pocos años al Diario Oficial El Peruano, recordando el incidente, que “López Antay es un artista popular maravilloso”, pero que “no hay que mezclar las cosas. Un Ferrari es precioso como un caballo de raza, pero no hay por qué mezclarlos. Son mundos ajenos”, manifestó.”
La visión del afamado pintor ya no es compartida por las nuevas generaciones de artistas.
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