Page 267 - Velasco y la independencia nacional

Velasco en la Conciencia Juvenil: Huellas, Memorias y Lenguajes • Erick Tejada Sánchez
común o los intereses nacionales. Un segundo elemento po- dría ser la determinación para acometer los cambios que el país requiere, para mejorar las condiciones de vida de los peruanos y asegurar condiciones mínimas para el desarrollo personal de los ciudadanos y la convivencia social. Un ter- cer aspecto estaría relacionado con el balance crítico de los aciertos, errores y limitaciones del proceso de reformas que el velasquismo decidió emprender. En este punto merecen especial atención las enormes distancias que mediaron en- tre los objetivos de las reformas y sus resultados, los aspec- tos técnicos del diseño y la implementación de las políticas, pero también las condiciones políticas e institucionales para el sostenimiento y la continuidad o no de las reformas.
El General Velasco y su gobierno difícilmente serán mo- tivo de consenso, al menos en el corto y mediano plazo, en parte por el accidentado destino de su proyecto político, pero sobre todo porque llegado el momento tomaron par- tido por los intereses de los sectores subalternos del país y orientaron al Estado en esa dirección. Nótese que, en el con- texto del régimen oligárquico, incluso los propios intereses nacionales devenían subalternos, subyugados a los intereses inmediatos y estrechos de los sectores dominantes. Las re- formas aplicadas se explican en esta convergencia histórica y práctica, más que puramente ideológica, de lo nacional con lo popular, en ruta hacia la modernización del país. La gran- deza del Perú sustentada en la justicia social es una síntesis posible del legado de Velasco para las nuevas generaciones. Este aprendizaje, empero, por valioso que sea, no alivia a las y los jóvenes de examinar al Perú de hoy con sus propias herramientas, ni de plantear nuevas alternativas ajustadas al tiempo en que vivimos y a las necesidades que como co- lectividad experimentamos. A fin de cuentas, como escribió Alberto Flores Galindo, el escenario de la búsqueda no es el pasado, sino el futuro.
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