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GCF NEWS 67
El tú lírico vive, pero muere en el yo lírico y esa muerte
representa el duelo, la ausencia y el desconsuelo. Al
respecto, Ferrer (2013) señala: “el recuerdo y el olvido
parecen caminos para acceder a la soledad, aquí se
da una alternancia entre el pasado del recuerdo y el
olvido, el presente de la soledad” (p.18). La soledad es
la que trasmite la ausencia y el recuerdo del que no
está, pero en el fondo hay anhelo de revertir el tiempo,
para no sentir la pérdida del ser amado. En el poema
se encuentra la zozobra de todos los momentos
vividos que se añoran recuperar. Asimismo, la
exageración de los sentimientos y de los sentidos, que
traspasan el lenguaje y permiten que el lector
experimente la agonía del yo lírico.
Ahora, se sustenta la memoria que expone la niñez y
el paso del tiempo desde el poema “Palabras para
aventar en el olvido”. La infancia es una etapa
recordada por el hombre, en este caso Héctor Rojas
Herazo plasma la importancia de la niñez y la
decadencia del hombre a través del tiempo. Las
estrofas refieren a las facetas del crecimiento del
hombre porque expone el embarazo, el nacimiento, la
infancia, la adultez y el tiempo que no se recupera.
“Estos eran nuestros amados impulsos. / Está era, en
verdad, nuestra llegada” (p. 48). Los dos primeros
versos exponen la felicidad del nacimiento de un niño,
los impulsos del feto en el vientre de la madre y la
idealización del mundo.
En ese sentido, Bachelard (1997) expone: “Esa profundización que sentimos cuando soñamos con nuestra infancia,
explica que toda ensoñación, nos sume la contemplación de una gran belleza del mundo. Un resplandor de
eternidad desciende sobre la belleza del mundo” (p.154). Para el niño el mundo es perfecto, risa, juego y travesuras.
El texto lírico expone: “Estamos como los niños/ cuando tropiezan con el muro en la mitad de un juego. / Nos
tocamos la frente e invocamos los vocablos amados / y recordamos aquella mujer que se aferró a nuestros ojos
desde una acera difusa” (p.48). A través de los verbos en pasado, el recuerdo de la infancia expone la perfección
en el amor de la madre, la mujer que cuida, sana y con sus brazos brinda refugio, abrigo y tranquilidad. Pero, la
adultez llega y con ella las decepciones, el tiempo y el mundo ya no son sus mejores aliados; en los versos 4, 5 y 6 el
escritor expone que la fuerza física ya no es la misma, y en el transcurrir del tiempo hay desolación por los propósitos
no alcanzados. La obra muestra el cambio abrupto que representa para el infante la adquisición de las
responsabilidades de la adultez, asimismo evidencia que hay desolación porque muchas de las cosas deseadas, en
la niñez, no se lograron, por lo tanto, hay un sentimiento de inferioridad. El recuerdo de la infancia trae desolación y
un sin sentido de la vida. Este trabajo realizó un recorrido literario enfatizado en tres poemas: “La casa entre los
robles”, “Segunda estancia y un recuerdo” y “Palabras para aventar en el olvido” para cuestionar la memoria desde
tres aspectos: primero, el gran valor sentimental otorgado a los objetos. Segundo, la memoria que alude a la
soledad y a la ausencia del ser amado. Tercero, la infancia debido a que es allí donde la memoria está más
presente. Finalmente, se expone que la carga del tiempo verbal en pasado que tienen los poemas es una de las
mayores herramientas que utiliza el autor para referirse a los recuerdos.