Page 7 - N3_FPAR_TEMA3

BLOQUE COMÚN NIVEL 3 – Factores psicosociales del alto rendimiento
Tema 3 – Motivación y deporte de alto rendimiento
 Los castigos:
Si los refuerzos se utilizaban para premiar una conducta considerada “positiva”, los castigos servirán precisamente para lo contrario. Así, lo que buscan es castigar una conducta “negativa”, con el objetivo de que esta no se repita en el futuro. Esta conducta puede ser muy variable: una falta de respeto a alguien del equipo, falta de intensidad en los entrenamientos, etc.
Conviene señalar que así como es bueno reforzar una buena ejecución técnica de un movimiento, no es bueno castigar una mala ejecución técnica (como no te sale este movimiento técnico, te impongo un castigo). Esto puede provocar que en el futuro, la persona, por miedo al castigo en caso de una mala ejecución, evite realizar la conducta. Si llegamos a este punto, la progresión técnica de esa persona se estancará.
Existen dos tipos de castigos:
Castigo positivo: Consiste en ofrecer o presentar algo negativo a una persona cuando realiza una conducta “negativa”, con el objetivo de que esa conducta no se repita en el futuro. Ej: un grito, mandarle sentarse en el banquillo, poner una sanción económica...
Castigo negativo: Consiste en retirar un estímulo positivo a una persona, cuando realiza una conducta “negativa”, con el objetivo de que esa conducta no se repita en el futuro. Ej: quitarle una prima económica o una beca, no dejarle asistir a una competición que le motiva mucho, quitarle los ejercicios que más le gustan, etc.
Del mismo modo que sucedía en los refuerzos, ambos tipos resultan igual de eficaces, con lo que la elección de uno u otro dependerá de la situación en que nos encontremos.