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4.4 Sistema Nervioso simpático
Sus fibras se originan en las neuronas situadas en la parte lateral de la sustancia gris de la D1 a la L2. De ahí van a los ganglios del tronco simpático y por último llegan a órganos y tejidos periféricos: D1 hacia la cabeza, D2 al cuello, D3-D6 al tórax y extremidades superiores, D7-D11 al abdomen y D12-L2 a extremidades inferiores. Ésta es una distribución aproximada ya que se dan superposiciones y depende de la situación originaria que cada uno ha tenido en su período embrionario. Cada neurona preganglionar simpática puede hacer sinapsis con 20-30 neuronas postganglionares, distribuidas por distintos órganos.
Se activa cuando la supervivencia está en peligro, por lo que sus acciones son: aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria, aumento de la tensión arterial, vasodilatación muscular y vasoconstricción esplácnica, aumento de la glucemia, dilatación pupilar y liberación de catecolaminas (noradrenalina).
4.5 Sistema Nervioso parasimpático
Sus fibras se originan en el tronco encefálico, en los núcleos de los pares craneales III (oculomotor), VII (facial), IX (glosofaríngeo) y X (vago), y en la médula sacra.
El nervio vago es responsable de más del 75% de la actividad parasimpática, inervando a: corazón, pulmones, esófago, estómago, intestino delgado, mitad proximal del colon, hígado, vesícula biliar, páncreas y parte alta de los uréteres.
Las fibras sacras se reúnen para formar los nervios pélvicos que se distribuyen por: colon descendente, recto, vejiga, porción baja de los uréteres y genitales externos.
Sus acciones podrían considerarse opuestas a las realizadas por el simpático. La actividad parasimpática puede entenderse en un contexto de reposo en el que el organismo repone sus depósitos metabólicos y recupera estructuras dañadas.
4.6 Sistema Nervioso Central
La actividad muscular representa el resultado de la transformación de un impulso nervioso en energía mecánica.
Para que esta actividad esté estructurada es necesario que participen una gran cantidad de mecanismos reguladores del SNC.
La actividad muscular podemos clasificarla en:
 Estática  Dinámica
4.6.1 Actividad muscular estática: es la base de los movimientos y comprende el estudio del tono muscular y del mantenimiento de la actitud postural equilibrada.
El tono muscular es la actividad permanente del músculo:
Fija la actitud, preparando el movimiento.
Mantiene el gesto, la estática y el equilibrio.
4.6.2 Actividad muscular dinámica: para realizar movimientos se hacen necesarios una serie de mecanismos de coordinación y regulación: voluntarios (velocidad e intensidad del movimiento); reflejos y automáticos (regulación entre músculos agonistas y antagonistas).
De este modo distinguimos tres categorías de movimientos según los niveles de función del SNC: movimiento voluntario (nivel cortical), movimiento automático (nivel subcortical) y movimiento reflejo (nivel medular).
BASES DEL ENTRENAMIENTO DEPORTIVO – TEMA 4 6