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Protección de pies y piernas.
Los empleados que puedan sufrir lesiones en los pies o las piernas por la caída o el rodar de
objetos o por aplastamiento o penetración de materiales deben usar calzado protector. Asimismo,
los empleados cuyo trabajo implique exposición a sustancias calientes o materiales corrosivos o
venenosos deben contar con equipo de protección para cubrir las partes del cuerpo expuestas,
incluidas las piernas y los pies. Si los pies de un empleado pueden estar expuestos a peligros
eléctricos, se debe usar calzado no conductor. Por otro lado, la exposición en el lugar de trabajo a
la electricidad estática puede requerir el uso de calzado conductor.
Algunos ejemplos de situaciones en las que un empleado debe usar protección para los pies y/o
las piernas incluyen:
• Cuando objetos pesados como barriles o herramientas puedan rodar hacia o caer sobre los
pies del empleado;
• Trabajar con objetos afilados como clavos o puntas que puedan perforar las suelas o la parte
superior de zapatos comunes;
• Exposición a metal fundido que pueda salpicar los pies o las piernas;
• Trabajar sobre o cerca de superficies calientes, mojadas o resbaladizas; y
• Trabajar cuando existen riesgos eléctricos.
MANUAL DE AUTOINSTRUCCIÓN NTS-104 “EQUIPOS DE PROTECCIÓN PERSONAL” | 108