Page 40 - Untitled
P. 40
INTRODUCCIÓN AL CAPÍTULO
Localizar las tribus perdidas ha sido, (y aun para muchos
lo sigue siendo), un rompecabezas tremendo. Sin embargo, y
como ya hemos apuntado, la Biblia nos da todos los detalles
para hacerlo, aunque a pesar de esto, muchos la dejan de lado
buscando señales humanas que indiquen, donde se encuentran
a día de hoy.
Ahora, meditemos un instante. ¿No fue Dios quien los
castigó por su pecado? ¿no fue Dios también, quien profetizó
sobre su expansión? y, ¿no fue Dios quién profetizó su vuelta?
Por lo tanto, si Dios ya lo profetizó todo, Él dejó las señales en
la Biblia, y sólo siguiendo estas señales, podremos
encontrarlas. Acompáñeme en este viaje a través de las
profecías Bíblicas, y tengamos fe en la Palabra de Dios. Las
señales están ahí, examinémoslas.
Las señales que identifican las tribus perdidas, son
muchas, pero aquí señalaremos algunas de ellas, que son
suficientes para justificar el origen Hebreo de los Calós.
PRIMERA SEÑAL: ERRANTES POR LAS NACIONES.
La expansión de Israel, fue una consecuencia del castigo
del Señor por causa de su desobediencia. Además, tanto la
casa de Israel como la casa de Judá, son el reloj que marcará la
hora de la Venida del Señor, y ambas tienen que ver con las
señales de los últimos tiempos. No obstante, a pesar del mal
caminar de las dos casas de Israel, Dios las sigue usando para
anunciar que los tiempos que vivimos, son los últimos
tiempos, antes de la venida del Mesías de Israel, nuestro Señor
Jesús, que reinará desde Jerusalén eternamente.
Si alguien pretende justificar que pertenece a las tribus
perdidas de Israel, debe mostrar al menos, que cumple todos
40