Page 6 - MDS PRONACA 20

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SOMOS UNA FAMILIA
FAMILIA
Gracias por el apoyo y acompañamiento durante todo el 2020, en los tiempos más oscuros de la pandemia y en los momentos más cruciales para la familia Pronaca.
a cabo el 14 de marzo - apenas dos días después de haber ocupado la Presidencia Ejecutiva - fue cuidar a nuestra gente. Contratamos inmediatamente un seguro contra Coronavirus para nuestros colaboradores y sus familias, el mismo que fue y sigue siendo de muchísima utilidad. La segunda decisión fue que siguiéramos operando a como diera lugar, entendiendo nuestra responsabilidad ymisióndecontinuarproduciendoy distribuyendo alimentos de primera necesidad a lo largo y ancho del país. Lo tercero, en vista de las dificultades que estaban enfrentando muchísimas familias ecuatorianas, decidí que era indispensable ser solidarios y donamos 3,6 millones de raciones alimenticias, principalmente proteína, a nivel nacional por medio de Bancos de Alimentos y de Diócesis. Concomitantemente, enviamos 30.000 kits de alimentos a nuestros 7.400 colaboradores, contribuyendo así a la solución de las complicaciones que tenían sus familias para abastecerse.
Al finalizar marzo, terminamos un trimestre con ventas netas de 191 millones de dólares y un cumplimiento del presupuesto del 98%. Para fines de abril, las ventas netas cayeron 30% frente al presupuesto y hasta un 60% para algunos negocios, como fue el caso de pollos y cerdos, causado
por el cierre total de los canales de Food Service, Tradicional y Mercados Populares.
Con todo esto, tomé una decisión importante: nadie perdería su empleo, que juntos saldríamos de la crisis y que seguiríamos de pie. De esa forma, se generó tranquilidad a nuestros colaboradores, para que se enfoquen en nuestros clientes, productos y procesos. Para transmitir de manera más cercana el apoyo, visitamos los centros de operación y las comunidades aledañas, enfatizando el compromiso de mantenernos unidos y firmes en nuestro propósito de “Alimentar Bien”.
Innovamos y lanzamos rápidamente productos para la base de la pirámide, así como productos fraccionados que requieren de menor desembolso para un consumidor repentinamente empobrecido. Además, ágilmente, instauramos un esquema logístico con facturación, cobro en línea y un portafolio acotado para llegar directamente a urbanizaciones en Quito y Guayaquil, durante el tiempo de cuarentena, proyecto que dio extraordinarios resultados. Nuestro equipo comercial y logístico nunca dejó de abastecer a los clientes, robusteciendo de esta manera el vínculo con nuestros consumidores.
Cuando miramos resultados tan positivos en un entorno de crisis nunca antes visto, la conclusión lógica es que los mismos responden a la presencia de un extraordinario y heroico equipo de trabajo, que dio todo de sí para mantenerse de pie.
Finalmente, todo lo antes mencionado no se hubiese podido realizar sin el apoyo, guía y acompañamiento de tantas personas que estuvieron muy cercanas. Por eso, deseo dar gracias a mi padre Luis Bakker Jr., a mi hermano