Page 1153 - JUNIO 2024
P. 1153
Cuando el aire fresco y la luna iluminan mis pasos, siento tu presencia, y 11
la brisa que acaricia mi rostro me trae tu amor.
Así, renazco a la vida por muy cansado que esté, ya que tú eres el aire que
necesito.
Estoy aquí para ti, como siempre lo he estado siempre lo estaré. TÉ
CIELO.
Aquí estoy, aquí estaré...
Aquí estoy, donde siempre he estado, abre tu corazón y extiéndeme el
alma que mi sonrisa es tu temor derrotado y tu tímida esperanza.
Eres la razón de que mi aliento no vacile, aquí estoy, con todo lo que siento
para ofrecerte mi amor.
Si sientes que con eso no basta, cuando te aflore una lágrima conviérteme
en tu sueño, para que así yo pueda ocupar desde lejos cada vacío de tu vida
y gritar a viva voz, para invadir tu silencio y pedirle a Dios que cuando yo
no esté a tu lado, él siempre te tienda su mano como quisiera yo hacerlo.
Aquí estoy, como siempre he estado, aunque no me veas, sentirás mi
presencia cuando en la mayor de las soledades te encuentres.
Nuestro amor no es fácil, está lleno de melancolías, pero vale la pena
porque también está lleno de esperanza y cuando te digo que estoy... es
que así es, y siempre estaré. 7
Cuando en ti no encuentres consuelo por la distancia que nos separa,
aférrate a nuestro recuerdo, a nuestro amor que tanto a ti como a mí nos
dará la fuerza que necesitamos hasta poder al fin estar juntos.
Regálame una sonrisa de lejos, dame esa mirada que siempre necesito y
que solo tú sabes dar.
Cuando en las noches escuches alguna melodía y tus ojos se llenen de
lágrimas por no estar cerca de mí... aprieta fuertemente la almohada que
es la que guarda nuestros más hermosos momentos.
Aunque tú no estés aquí siento tu presencia, tu aroma, y así será
eternamente, porque mi amor es un amor para siempre.
(Entre tú y yo no hay distancias, sólo un paréntesis)