Page 1523 - JUNIO 2024
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No quiero verme así lo sabes, deshojando estas horas que convierten 8
mi tiempo en siglos de añoranza, y no lo niego amor, mis besos desean
la dulzura de tus besos, la ternura de tus labios cuando llega el
momento y volamos juntos por el cielo inmenso de lo soñado y lo
querido, despertando cada frase dormida que diría cuanto significa
estar así, como si el entero universo comprendiera que hay mucho más
en esta vida que la cotidiana rutina de trabajar y luchar por aquello
que nos permite vivir otro minuto más en este mundo.
No importa la distancia, callaré mi silencio, lo llenaré con tu nombre y
los versos que escribí y escribiré porque te cielo.
Abriré las persianas y hasta la luna misma se enterará que desde el
instante aquel que te escuché, cuando vi tu rostro maravilloso vestido
de sonrisa y esperanza, desde ese día sellaste tu nombre en este
corazón que te sueña... sí supieras que me pide que deje atrás todo y
tome cuanto antes el camino que más pronto pueda llevarme a ti.
Amor, por muy lejano que parezca el momento llegará, todo será
entonces, así como quisimos, después de todo será, y me perderé
entonces en la luz de tu mirada, allí donde se mece tu sonrisa.
Sabes, hay tantas cosas que al escribirte pasan por mi mente. ¿Qué
sería de este mundo si no existiera el amor? ¿Te imaginas? No sólo
sería un lugar tedioso y sin verdadero motivo para habitar, sería un
sitio sin belleza o poesía, sin razones para una hermosa canción o un
atardecer que se aleja vestido con los hermosos colores del ocaso.
Sería algo así, como despertar sin el trino de las aves que acompañan
las primeras horas del alba, o andar por la arena sin escuchar el
sonido suave y arrullador de las olas que llegan y vuelven a perderse
mar adentro, dando paso a las siguientes que quieren de algún modo
besar y acariciar la orilla.
No amor, no quisiera estar aquí, ¿para qué si ni siquiera hubiera
sentimientos de felicidad o tristeza? ¿No es acaso el amor que vive en
nosotros y sentimos quien causa dichas emociones? De qué valdría
existir si no importara el roce de la piel o los abrazos, ni siquiera la
risa juguetona de los niños o la felicidad que se siente cuando después
de años encontramos de repente a un amigo de la infancia.
Vivir y amar van de la mano, como amarte a ti es y ha sido la razón de
mi alma para hallarse presente, como ahora en esta carta.