Page 1458 - JULIO
P. 1458
Un rostro de Dios que no conocía encontré en ti, ese mismo Dios que
18
regala bendición a los que aman, cada mirada dulce tuya me recuerda que
amar debe ser un regalo del cielo que llega a la tierra, y que debe rescatarse
y cuidarse.
Rescatemos también los besos que no llegaron a nosotros y se quedaron
en el mar, si acaso están en el cielo dejémoslos ahí, alguna razón tendrá
para haber permanecido ahí en los días en que el sol fue muy pequeño para
nosotros, había mucho de ti por ese entonces.
-Todas las cosas están en ti-
En las calles de mi ciudad, y en los atardeceres del campo, por eso la vida
fue soportable y siempre hubo la esperanza de coincidir, traes contigo toda
tu dulzura, tu ternura de todas esas noches en que la luna no te dijo nada
y esperaste paciente que llegase una carta, pues no podría llegar la flor
que tuve en mi mano.
La distancia no pudo contra este gran amor que fue más grande.
Debes saber que te cielo, llevaré casi todas las gotas de lluvia que nos
mojaron en ciudades distintas, todas las letras de tu nombre, todas
nuestras cartas nos esperan
Todo nuestro amor, y ya ninguna distancia ...que nos separe.
Siempre mío, siempre tuya, siempre nuestro.
Desde mi rincón para ti.
Tu amor.
Mi Esposa, mi Amiga y mi Amante, siempre tuyo, siempre mía, siempre
nuestro. Te cielo.
Te cielo vida mía, gracias, muchas gracias por permitirme el amarte día a
día, noche a noche. Te adoro vida mía…
Te cielo porque eres mi complemento, porque eres en mi vida el amor que
soñé un día tener, te cielo por ser quién eres.