Page 1715 - JULIO
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Hoy cuando escribía esta carta he tenido que retener en mi garganta el                      21
                  llanto  que  estaba  a  punto  de  salir,  sufrimos  la  lejanía,  la  distancia,

                  extrañamos no abrazarnos y hablar de cosas nuestras...

                  Miro tu foto y me entran ganas de correr a tu lado y abrazarte.

                  Quisiera que todo este océano que nos separa fuese sólo una línea delgada

                  que podamos cruzar, pero no es así, y vuelvo a ver mi realidad.

                  Entre  suspiros  calladito  te  escribo  desde  este  rincón  de  mi  casa,
                  contándote todas estas cosas que tú ya sabes y esperas de mí.


                  Desde que llegaste a mi vida supe que serías el amor de mi vida.

                  Siempre  te  esperaré,  siempre  te  extrañaré,  nunca  mi  amor  de  ti  me
                  apartaré.


                  ¡Si supieses todo lo que siento! Mi corazón se hace tan grande como el
                  mismo universo donde hacemos nuestro hogar cada vez que una estrella
                  miramos.


                  Y mientras miro la inmensidad de este mundo, estoy segura que podré
                  superar todos los obstáculos que vengan, porque tú eres mi fuerza, mis
                  ganas de vivir y de sentir.


                  Tú significas todo para mí, sin tu presencia no estaría escribiendo estas
                  letras que cada día inspiras, estas cartas que están siempre plagadas de
                  palabras repetitivas pero que se sientan muy bien cuando las decimos y

                  recibimos.

                  Eres el amor de mi vida, ya nada puedo hacer para cambiar este destino, y

                  tampoco quiero, pues tú eres lo que más anhelo, no puedo imaginar la vida
                  sin ti, sería como mirar un cielo sin estrellas, como no querer que se levante
                  el sol... cosas imposibles.


                  Así es mi amor para ti, único, amable, leal y sobre todo fiel.

                  Tú que eres la dueña de mis pensamientos, la que me conoce y no me juzga,
                  la que conoce la historia de mi vida, eres mi gran amor.


                  Tu nombre se enreda entre mis versos y me hace ser mejor persona cada
                  día.
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