Page 1978 - JULIO
P. 1978

Gracias por existir
                                                                                                              17

                  Mi querido amor:

                  Al escribir esta carta, lo primero que quiero hacer es darte las gracias por

                  todo lo que me entregas, por ese amor y cariño que me das.

                  Quiero darte las gracias por hacerme tan feliz.

                  No  ha  habido,  ni  habrá  jamás,  un  amor  como  tú.  Bien  es  cierto  que

                  muchas historias de amor se habrán escrito, más la nuestra es diferente a
                  todas,  es una  historia  de esperanza  e ilusiones  donde  antes  sólo  había
                  soledad.


                  Entre nosotros hay amor, hay respeto, en fin, mi amor, lo que quiero decir
                  es que esta carta es para agradecer que estés en mi vida, eres un verdadero

                  regalo del cielo para mí.

                  Cuando alguna vez te dije que tú tenías las llaves para entrar a mi corazón,

                  así era y así es. Sólo para ti este corazón es capaz de abrirse, y se abre para
                  decirte cosas dulces que sólo almas enamoradas pueden sentir o decir.


                  Soy muy feliz pues pese a la distancia que hay entre tú y yo, cada día puedo
                  expresarte este amor que habita en mí.


                  En todas las situaciones de mi vida estás presente, en casa cosa que hago
                  siempre busco hacerte feliz, y me encanta saber que también me cielas,

                  que  juntos  seguimos  luchando  para  estar  juntos  y  hacer  realidad  este
                  hermoso sueño de amor.


                  En mis noches siempre te busco, entre mis sábanas y entre mis letras, mi
                  voz siempre susurra tu nombre.


                  Mi corazón siempre está atento a tu llamado, no hay otro amor igual, ni
                  lo habrá jamás.


                  No quiero que estés triste cuando no sabes de mí, ya sabes que a veces soy
                  de largos silencios, pero siempre vives en mí.

                  Aun en mis silencios, alegrías y penas, tú vives en mí.
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