Page 552 - JULIO
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Sigamos amándonos como siempre, no dejemos secar este amor                                  12

                  por nuestros miedos. Soy la que escribe estas cartas que se hicieron
                  letras de amor al sentir este amor correspondido.

                  Tú lo significas todo para mí.


                  Como decirte que te cielo. Es algo más fuerte que el amor, es más
                  fuerte que todo. Lo que siento cuando estoy cerca de ti es para mí

                  lo más hermoso que me puede pasar. Eres el aire que respiro, la
                  sangre que corre por mis venas, que recorre todo mi cuerpo y llega

                  a mi corazón.

                  Simplemente, te necesito como la luna a la noche. Eres la persona
                  más dulce, más tierna, más hermosa… eres la persona perfecta.


                  Tú lo significas todo para mí. Sólo un beso tuyo, una mirada, una
                  caricia,  podría  transportarme  al  paraíso…  No  me  cansaré  de

                  decirlo, te cielo. Y, aunque trato de explicártelo, siento que no hay
                  formas o palabras para expresarte todo lo que mi corazón siente.


                  Nunca nada había tenido tanto sentido para mí, conocerte me ha
                  hecho comprender que estamos hechos el uno para el otro.


                  Te necesito, para mirarte y perderme en tu mirada. Para poder
                  soñar cada noche. Para despertar y pronunciar tu nombre.

                  Anhelo un beso tuyo, que tu calor me quite el frió… quiero recorrer

                  cada rincón de tu cuerpo, para que los días dejen de ser grises,

                  para que no se apague mi alma y se mantenga viva y pasional.

                  Quiero que sepas que vivo para amarte. Déjame pronunciar una
                  vez más estas bellas palabras: te cielo. Amor mío: De mis labios y

                  de  mis  manos  nacieron  bellas  palabras  alimentadas  por  tu
                  corazón,  me  emborrachaste  de  sentimientos,  me  aliñaste  de

                  pasión, acariciaste mi cuerpo y alma, reinventaste el amor.

                  Contigo aprendí el idioma de las caricias, la importancia de

                  los gestos, el poder de las palabras, Aprendí que los ojos también
                  abrazan, que las manos también besan o que existe la compañía,

                  aunque te acompañé la soledad.
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