Page 724 - JULIO
P. 724
Así pasan las horas y yo sigo amándote aquí en mi cuarto que siempre 14
respira tu amor, tu nombre; aquí puedo escribir estas cartas que te llegan
y me hacen saber que estás contento, que sonríes al ver mis letras, que te
llegan como promesas cada mes… porque así te cielo yo.
— Por ahora es una carta, mi amor… pero eso cambiará
— Mi vida entera ya es tuya, sólo para ti, amor mío. Nos pertenecemos,
nos amamos, nos cuidamos… quédate en mí o me quedaré yo en ti; es lo
mismo, porque somos uno solo para amarnos por siempre.
Esa es la eterna promesa que un día nos hicimos, y así, cumpliéndola,
seguimos siempre juntos, siempre fieles, siempre amándonos…
Mi amor, nunca dudes de este amor, nunca dudes en decirme cuanto me
cielas, porque yo de ti no dudo ni por un instante, mi mundo gira junto al
tuyo y así debe ser hasta que estas cartas sólo sean un recuerdo porque
pronto lo más lejos que estarás de mí será a una puerta o quizás una
ventana, pues yo sabré esperar el tiempo que haga falta para estar contigo.
Marzo, mes de cambios y de nuevas estaciones…, más mi amor continúa
inamovible desde el día que te conocí.
Eso es todo por hoy, te cielo con todo mi corazón.
Te cielo vida mía, gracias, muchas gracias por permitirme el amarte día a
día, noche a noche. Te adoro vida mía…
Te cielo tanto…
Tu amor que mucho te extraña... y te ciela.
Mi Esposa, mi Amiga y mi Amante, siempre tuyo, siempre mía, siempre
nuestro. Te cielo mi Begoña.
Eres la mujer de mi vida
Y es que eres la mujer de mi vida, así, simple y llanamente. Me complace
más que nada en este mundo el amarte, porque sé que no te fallaré, porque
contigo quiero amanecer, anochecer, atardecer y todo lo que sea tenerte en
mis brazos.
Quiero darte los abrazos que tu cuerpo te pide, los besos que tu boca me
grita, y en general, perder todo mi tiempo contigo.