Page 137 - Los siete sabios de Grecia, en sus siete veneradas sentencias

de Grecia* ii^
Solo las promesas de Dios se
ven acompañadas cotilas obras: Di-
xit , ¿/ fací.a sunt. Lo que una vez
promete, lo cumple. En los prime-
ros .iños de la
infancia no habla el
hombre; porque parece que quiso
sabia la naturaleza, que las palabras
esperasen á las obras, que no
y se
soltase la lengua en edad, que están
presas las manos en las ligaduras de
laxas,
y asi le dá voz para pro-
meter, quando ya tiene manos pa-
ra cumplir. La mano,
y la voz son
las señales de un Relox bien regula-
do; porque la mano apunta las ho-
ras, luego que las dá
la voz de la
campana?, ofreciendo a los ojos
la
demostración del sonido
, que yere
los.oídos. Solo de este modo puede
prometer, q^uien como puntual Re-
lox conformare con la voz la mano
acompañando
unidamente la eviden-
cia délas obras, con la harmoniosa
consonancia de las palabras.
H Con