Page 217 - El judío internacional
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envidiar, y cuya propiedad creerán poder después repartirse entre sí".
Es todo esto de público dominio, como que ocurre ya en Europa. Las armas primeramente
esgrimidas fueron de índole económica. El plan judío ser realizó merced a la división de la sociedad
no-judía en ricos y pobres. Divide y vencerás, tal es el lema del hebreo. División de la sociedad
cristiana por medio de animosidades económicas, confesionales, sociales y nacionales, en tanto los
judíos forman una unidad compacta, que solo por este hecho se halla en condiciones de dominar a
un mundo dividido en su seno. Tengamos únicamente en cuenta el enorme poderío hebreo en
Rusia, Alemania, Austria, Francia, Italia, Inglaterra y los Estados Unidos, como resultado de la
guerra mundial. Ningún banquero judío de Rusia fue molestado, en tanto que a los no-judíos se les
paso por las armas, quitándose sus bienes. El bolcheviquismo no suprimió el capitalismo; solo
traspaso los capitales de propietarios no-judíos a manos judías, y este es en realidad el único y
t
exclusivo objeto, tan o del socialismo, como del anarquismo y del bolcheviquismo. Allí donde se
publique la caricatura de un capitalista cubierto de oro y brillantes, llevara, inevitablemente las
facciones de un tipo no-judío. Los "capitalistas" denunciados en el periodismo rojo, no son nunca
judíos. Cualquier huelga de importancia, en los ferrocarriles, en la industria del acero o en la
minera, va siempre contra empresas no-judías: radica ahí toda la finalidad del movimiento obrero
rojo. Es de una raza extraña, es semita y es anticristiano.
Un punto interesante de los "Protocolos" es el de la contraposición del sistema financiero
actualmente favorecido por los judíos, y que representa el sistema hebreo genuino.
Se dice en el Protocolo 20: "El patrón de oro destruyó a aquellos Estados que lo adoptaron, pues
no pudo realmente satisfacer la demanda de signos monetarios, especialmente por la razón de que
retirábamos tanto oro de la circulación como considerábamos conveniente". El no-judío ingenuo
preguntara: "¿Por que podían los hebreos tener interés en retirar el oro de la circulación, no
pudiendo así extraer beneficios del mismo?" No olvidemos al respecto lo dicho acerca de la
diferencia fundamental entre el "productor" y el "recolector". Para la gente cuya herramienta es el
dinero, una crisis económica resulta mucho más lucrativa que una época prolongada de bienestar
económico.
"Provocamos situaciones criticas en la vida económica, con tal de dinero de la circulación". Todo el
mundo sabe que la desaparición del dinero disponible de la circulación general, produce pánico y
consternación. Nosotros, los norteamericanos, fuimos testigos durante quince meses de tal
desaparición y de sus consecuencias. La orden respectiva se envió telegráficamente a los
financistas para un día determinado, y ese mismo día sobrevino una catástrofe económica en todo
el territorio de la Unión. Banqueros honestos intentaban ayudar, en tanto que aquellos otros
iniciados extratanpingües ganancias de aquella catástrofe. Se substrajo el dinero a su objetivo
legal, siendo dado a los especuladores al 6 por ciento, quienes a su vez volvieron a prestarlo al 30
por ciento.
No se le ocurrirá a ninguna persona cuerda querer explicar tales acontecimientos como "leyes
naturales", ni como consecuencia de una practica comercial honesta.
En otra parte se burlan los Protocolos de la política financiera de los gobiernos, diciendo: "A raíz de
métodos admitidos por gobernantes torpes, vacióse el Tesoro publico. Seguía a esto el periodo de
contraer deudas y de gasta los últimos activos, y esto llevo a los Estados no-judíos al borde de la
bancarrota".
Están los Es tados en bancarrota, desde el punto de vista financiero, y se sostienen solo
artificialmente por medio de contribuciones tan enormes, que equivalen a la desposeción. Estados
Unidos, falsamente llamado el "país más rico del mundo", se halla en su condición de Estado
exactamente tan pobre y arruinado como cualquier otro. Nada tiene, salvo deudas, y sigue
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