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Representa la permanencia y persistencia esta razón, es importante que formemos
a pesar de todos los obstáculos, desalientos
e imposibilidades; eso es lo que distingue
a las almas fuertes de las débiles. Por tanto,
es un valor del carácter que se define
como la actitud de continuar, seguir,
persistir, insistir y avanzar, aunque existan
dificultades, problemas y adversidades.
Hay muchas personas que poseen un gran
talento, habilidad e incluso experiencia,
pero dejan de lado sus proyectos ante
cualquier dificultad. Una persona
perseverante, en cambio, cuando sufre
un revés o una caída, se levanta y sigue
adelante con sus objetivos.
Vamos a detallar los diez hábitos
principales de las personas que practican
la perseverancia como una actitud ante la
vida, por si pudieran servirte de ayuda:
Poseer una fuerza de voluntad, que los
impulsan a convertir sus sueños e ilusiones
en hechos concretos, es decir, deciden el
viaje de lo que realmente quieren para su
vida. Según Albert Einstein, “la voluntad
es la fuerza motriz más poderosa que
el vapor, la electricidad y la energía
atómica”. Es la voluntad, la perseverancia
y la confianza en sí mismo lo que imprime
valor a los esfuerzos que cada día una
persona realiza.
Una persona perseverante, cuando decide
emprender algún proyecto, procura por
todos los medios vencer toda resistencia o
molestia que surja, comprometiéndose a
concluir lo que ha empezado.
La gente que se detiene a mitad del
camino, o que dudan y se dejan invadir
por el miedo, no suelen alcanzar
satisfactoriamente sus metas.
La habilidad de proseguir, insistir y
continuar hasta el final, es fundamental si
queremos cumplir con nuestras metas y
objetivos personales.
Realiza una labor eficiente, aunque no te
guste hacerla, es básico, porque reconoce
que es una acción necesaria para llegar a
una meta.
Por lo general, son más las cosas que no
nos gustan que las que nos agradan. Por
el hábito de hacer aquellas cosas que
no nos agradan, para formar un carácter
perseverante.
Dominar el miedo y el temor, y
los convierten en su propia energía
potenciadora. Los miedos son esos
monstruos o fantasmas de tu mente. La
gente que persiste en sus propósitos trata
de realizar aquellas cosas que les dan
temor. Poco a poco van superando sus
miedos y consiguen seguir avanzando,
a pesar de las situaciones atemorizantes
que se les presenten.
Actuar con determinación significa
avanzar con paso firme y seguro para
conquistar un objetivo. Es el compromiso
de continuar e insistir no mirando el
obstáculo en el camino, sino visualizando
la meta en el horizonte.
La gente persistente es aquella que posee
la determinación de hacer lo que otros no
han hecho, y de llegar a donde otros no
han llegado. Es la virtud de arriesgarse,
de explorar lo desconocido y alcanzar
resultados.
La gente perseverante adquiere el hábito
de la resiliencia. Este término consiste
en la habilidad de una persona de salir
adelante y fortalecida ante una situación
problemática y traumática.
Reconocer que una tarea es más
satisfactoria si se ejecuta paso a paso,
la paciencia, el avanzar poco a poco
en la realización de nuestros proyectos
personales.
Imprime pasión a todo lo que realizas,
para que el trayecto hacia el propósito sea
más llevadero y satisfactorio. Observan la
vía que los llevará a la cima de sus ideales
como una fuente de alegría y gozo, por
una labor bien ejecutada.
El entusiasmo consiste en pensar “esto
es algo grandioso”. Es la actitud mental
de reflexionar en términos positivos, con
energía y vitalidad, para lograr excelentes
resultados en un proyecto.