Page 1689 - HASTA MAYO
P. 1689

Tú que eres la dueña de todas mis letras y de mis suspiros, ay… siente como
                  se acelera mi corazón cuando de ti me acuerdo, estás tan lejos de mis manos
                  que hasta respirar es doloroso.

                  Amor, déjame escribir letras cursis, que para el corazón no existe límites,
                  sólo sabe amar y yo nací para ti, para amarte hasta el fin de los tiempos.
                  Intento seguir adelante con lo nuestro, dame fuerzas para seguir escribiendo
                  estas letras de amor y dolor, que para eso no tengo temor.

                  Eres mía y eso me basta, yo te amo y o ¿acaso no he sido claro con cada
                  nota enamorado por mí escrita? Te amo y te llevo dentro, amor mío.

                  Esa es mi única justificación para este loco sueño que tengo contigo, para
                  las lágrimas que brotan en silencio cuando la soledad con su túnica triste
                  me cubre y me lleva tu rostro frente al mío, haciéndome gemir de forma
                  lastimera.

                  Eres mi causa y efecto, nada tendría hoy sentido si no es por ti o para ti,
                  porque nuestro amor es recíproco sin que ambos nos demos cuenta.

                  Mis letras hablarán por mí para ti, hoy y siempre…

                  ERES MI AMOR, MI SANGRE, MI VIDA

                  Vida mía, sabes de mis sentimientos, del intenso amor que siento por ti, de
                  cada una de mis ilusiones y temores dentro de mí.

                  No puedo dejar de pensar en ti, porque eres parte de mí, entraste en mi
                  cuerpo sin tener la necesidad de hacerlo físicamente… entraste en mi mente
                  como entran aquellos pensamientos del corazón…

                  Sé  que  no  soy  gran  cosa  y  mucho  menos  tan  especial,  soy  como  todas
                  aquellas personas con errores, con ilusiones, con un corazón, unos ojos, una
                  piel… y con un alma deseosa de ti.

                  Tú que conoces mi cuerpo, mis ojos, mi corazón…

                  Tú que miras como yo el cielo, que sientes el aire en tu piel, que miras las
                  estrellas cada noche deseando verme en ellas junto a ti…
                  Tú que has sentido correr las lágrimas en tu cara como yo cuando hemos

                  estado separados el uno del otro, cuando el dolor del amor ausente se hacía
                  insoportable… Ambos sabemos las cosas a las que nos hemos tenido que
                  enfrentar…




                                                                                                 1689
   1684   1685   1686   1687   1688   1689   1690   1691   1692   1693   1694